MADRID 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno aprobó el pasado mes de noviembre un Real Decreto que regulaba la venta por Internet de aquellos medicamentos no sujetos a prescripción médica, a la que en principio podrían acogerse los 1.235 medicamentos que se comercializan en España sin necesidad de receta.
Así se desprende de los datos de la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp) recogidos por la Fundación Salud 2000 en su informe 'Dispensación de medicamentos a través de sitios web' que han presentado este miércoles, en el que recuerdan que las farmacias que quieran dar este servicio deberán ofrecer toda la información necesaria a los ciudadanos sobre cómo tomar el medicamento y facilitar la resolución de las consultas.
Esta normativa busca confluir con la directiva europea de lucha contra medicamentos falsificados y ofrecer más garantías de salud a la población. Tras publicarse el Real Decreto, el Gobierno ultima el desarrollo del Real Decreto y antes de verano se espera que esté listo el sello europeo que servirá para identificar a las farmacias que están en disposición de cumplir con la nueva normativa con las debidas garantías.
Con esta nueva legislación, los usuarios tendrán la certeza de que el medicamento que adquieran a través de Internet no es falso y de que lo dispensa una farmacia homologada, al tiempo que permitirá preguntar al farmacéutico todas las dudas que surjan con más calma y por escrito.
"Con las prisas, no nos paramos a preguntar al farmacéutico sobre las propiedades de un fármaco concreto o cual nos viene mejor para nuestra dolencia. La venta 'on-line' de medicamentos puede proporcionar que la comunicación con el farmacéutico sea más fluida y constante, porque dispondremos de más tiempo al poder formular nuestras dudas con calma y por escrito a través de la web", ha reconocido Carmen González Madrid, presidenta ejecutiva de la Fundación Salud 2000.
No obstante, el presidente de la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (SEFAC), Jesús Gómez, confía en que este nuevo canal no distorsione la figura del farmacéutico y por ello insisten en que "debe utilizarse con las suficientes garantías para el paciente".
Para ello, esta entidad ha informado de que están preparando un código ético para que la venta 'on-line' de medicamentos no suponga una rebaja en la calidad de la dispensación, que se presentará en su próximo congreso que se celebrará en Málaga en mayo.
"Los farmacéuticos debemos ofrecer las mismas garantías que cuando el paciente acude físicamente a una farmacia", ha insistido Gómez, quien añade que las web de las farmacias deberán facilitar la resolución de consultas al respecto, como si la dispensación se realizara 'in situ'.
EL USUARIO TAMBIÉN TENDRÁ SUS OBLIGACIONES DURANTE LA COMPRA
Asimismo, recuerda que el usuario también estará sujeto a unas obligaciones y, por ejemplo, no podrá comprar de forma anónima ya que el farmacéutico debe poder ponerse en contacto con el comprador en el caso de ser necesario.
El farmacéutico, por su parte, tiene la obligación de guardar especial atención ante solicitudes de medicamentos en cantidades que excedan en tratamientos habituales para alertar de un posible abuso, garantizando a su vez la confidencialidad de los datos de los usuarios.
El farmacéutico será el responsable de que el medicamento llegue con todas las garantías desde la oficina de farmacia hasta el domicilio indicad, y el usuario tendrá derecho a la devolución del medicamento y al reintegro del importe en el supuesto de que el plazo de entrega supere el 50 por ciento del tiempo establecido.
Las farmacias comunitarias que deseen vender medicamentos 'on-line', deben comunicarlo a la consejería de salud de su comunidad autónoma y no se podrá promover la venta de medicamentos asociándola a ofertas de regalo, como con productos de parafarmacia.