MADRID, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los factores de coagulación de la sangre que entran en acción tras de una herida pueden ofrecer nuevas estrategias para combatir las bacterias resistentes a múltiples fármacos, según un estudio publicado en la revista 'Cell Research'.
Las infecciones causadas por estas bacterias representan un riesgo urgente para la salud pública, ya que faltan medicamentos efectivos para combatirlas. Una deficiencia en los factores de coagulación de la sangre, por ejemplo, en pacientes con hemofilia del trastorno de coagulación de la sangre, se ha asociado con enfermedades de infección bacteriana como sepsis y neumonía, lo que sugiere que estos factores de coagulación también pueden tener un papel en los mecanismos antiinfecciosos.
Ahora, un grupo de investigadores de la Universidad de Sichuan, en China, ha demostrado que los factores VII, IX y X, bien conocidos por su papel en la coagulación de la sangre, pueden actuar contra las bacterias Gram negativas, incluidos los patógenos ampliamente resistentes a los medicamentos como 'Pseudomonas. aeruginosa' y 'Acetinobacter baumannii'.
Ambas bacterias fueron recientemente incluidas en la lista de la Organización Mundial de la Salud entre las 12 que representan la mayor amenaza para la salud humana debido a su resistencia a los antibióticos. Las bacterias gramnegativas se caracterizan por sus envolturas celulares, que están compuestas por una membrana celular interna, una pared celular delgada y una membrana externa que las hace más difíciles de matar.
Xu Song, autor del estudio, explica que en su investigación han descubierto "una clase de proteínas antimicrobianas humanas eficaces contra algunas superbacterias resistentes a los medicamentos. A diferencia de muchos agentes antibacterianos que atacan el metabolismo celular o la membrana citoplasmática, estas proteínas actúan al descomponerse los lipopolisacáridos de la membrana externa bacteriana a través de la hidrólisis. Los lipopolisacáridos son cruciales para la supervivencia de las bacterias Gram negativas".
La capacidad de los factores de coagulación con sangre para hidrolizar lipopolisacáridos esenciales en la envoltura de las células bacterianas sugiere que podrían usarse potencialmente para combatir las bacterias Gram negativas.
Al examinar más a fondo el mecanismo, los autores mostraron que los factores de coagulación actúan sobre las bacterias a través de cadenas ligeras, uno de los dos dominios de las proteínas. Los otros dominios (cadenas pesadas) no tienen efecto. En las células del laboratorio, los autores mostraron que el tratamiento de las células de la bacteria 'E. coli' con cadenas ligeras produjo un daño claramente observable en la envoltura celular bacteriana inicialmente y a la destrucción casi completa de la célula en cuatro horas.
Los autores encontraron que la cadena ligera del factor de coagulación VII fue efectiva contra todas las células bacterianas Gram negativas analizadas. También se demostró que las cadenas ligeras, así como los factores de coagulación en su conjunto, son eficaces para combatir las infecciones por 'Pseudomonas aruginosa' y 'Acetinobacter baumanii' en ratones. Las cadenas pesadas no tuvieron efecto.
"No se ha informado que ninguno de los agentes antibacterianos conocidos funcionen hidrolizando los lipopolisacáridos --señala Xu Song--. La identificación del mecanismo antibacteriano basado en la hidrólisis del lipopolisacárido, combinado con características antibacterianas de los factores de coagulación de la sangre, y la capacidad de fabricarlos a gran escala en de costo relativamente bajo, puede ofrecer estrategias nuevas y rentables para combatir la urgente crisis de salud pública que plantean los patógenos gramnegativos resistentes a los medicamentos".