MADRID 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de científicos ha identificado un antibiótico de origen natural que puede ayudar en la lucha contra la tuberculosis resistente a los medicamentos. Cada año, aproximadamente 10 millones de personas enferman de tuberculosis (TB) y alrededor de 1,7 millones mueren a causa de la devastadora enfermedad en todo el mundo.
Uno de los principales antibióticos para la tuberculosis es la rifampicina, sin embargo, muchas cepas de la bacteria causante de la tuberculosis, 'Mycobacterium tuberculosis', han desarrollado resistencia a ella. Aproximadamente, 600.000 personas cada año son diagnosticadas con tuberculosis resistente a la rifampicina.
Ahora, investigadores de la Universidad de Newcastle, Reino Unido, y Demuris Ltd han identificado que un antibiótico de origen natural, llamado kanglemicina A, relacionado con el antibiótico rifampicina, es activo contra 'Mycobacterium tuberculosis' resistente a la rifampicina.
Los hallazgos de su estudio --que se detallan en un artículo publicado este jueves en la revista 'Molecular Cell'-- y se espera que este compuesto y la mejor comprensión obtenida de estos estudios puedan conducir a nuevos tratamientos farmacológicos efectivos en el futuro.
El equipo de investigadores utilizó métodos químicos, biofísicos, de biología molecular y microbiológicos, así como cristalografía de rayos X, para mostrar cómo la kanglemicina A se une a su ARN polimerasa objetivo y cómo logra superar la resistencia.
Se sabía que el antibiótico rifampicina se une a un surco en la molécula de ARN polimerasa y que las mutaciones que modifican la secuencia de aminoácidos de la ARN polimerasa pueden evitar esta unión, al tiempo que mantienen la capacidad de producir ARN.
MAYOR ADHESIÓN A UNA MOLÉCULA DE ARN
Kanglemicina A se une al mismo surco, pero su estructura reveló extensiones que también se adhieren justo fuera del surco, lo que le permite mantener su afinidad con la ARN polimerasa resistente a la rifampicina y la actividad antibiótica en bacterias resistentes a la rifampicina.
El director de este estudio internacional, el profesor Nikolay Zenkin, del Instituto de Células y Biociencias Moleculares de la Universidad de Newcastle, explica: "El tratamiento de la TB implica un cóctel de antibióticos administrados durante muchos meses, y la resistencia a varios antibióticos clave se está convirtiendo en un importante problema de salud pública en todo el mundo. Nuestros hallazgos son muy emocionantes y el primer paso para desarrollar un nuevo tratamiento farmacológico eficaz para pacientes con TB resistente a la rifampicina para evitar muertes en el futuro".
Por su parte, el doctor Michael Hall, de la Universidad de Newcastle, encargado de dirigir la caracterización química de la kanglemicina A, agrega: "Este es un desarrollo emocionante para el tratamiento futuro de la TB resistente a la rifampicina y muestra lo que se puede lograr cuando las empresas y universidades locales trabajan juntas".
Los investigadores examinaron más de 2.000 extractos de bacterias del suelo filamentosas utilizando una colección de Demuris Ltd, una empresa 'spin-out' de la Universidad de Newcastle, para evaluar su capacidad de inhibir el crecimiento celular o prevenir la producción de ARN, un proceso esencial en todos los organismos vivos, en bacterias.
El profesor Zenkin subraya: "El principal hallazgo de nuestro estudio es que la kanglemicina A es eficaz contra las ARN polimerasas resistentes a la rifampicina y también puede matar a 'Mycobacterium tuberculosis' resistente a la rifampicina. Describimos los detalles del mecanismo de inhibición y cómo la kanglemicina A logra mantenerse activa contra las bacterias resistentes a los medicamentos. "
Y continúa: "Los resultados ayudarán a acelerar la aprobación de la kanglemicina A para su uso en pacientes con tuberculosis y proporcionarán una base lógica para el desarrollo posterior de nuevos tratamientos farmacológicos".
Katsuhiko Murakami, profesor del Departamento de Bioquímica y Biología Molecular en la Universidad Estatal de Pensilvania, Estados Unidos, quien dirigió la caracterización cristalográfica de las interacciones de la kanglemicina A con la ARN polimerasa, cree que el descubrimiento es esencial para la seguridad pública.
"El reciente desarrollo de 'Mycobacterium tuberculosis' resistente a los medicamentos ha hecho que el tratamiento de esta enfermedad sea aún más difícil. Identificar nuevos compuestos que sean eficaces contra la ARN polimerasa resistente a la rifampicina es increíblemente importante para la salud pública", afirma.