MADRID, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
Coincidiendo con la 'vuelta al cole', el Grupo Federópticos pone en marcha la segunda edición de su campaña 'Control de la Miopía' para que las familias vigilen la presencia de esta patología en niños y adolescentes.
Tal y como recuerdan, "los estudiantes reciben el 80 por ciento de la información a través de la vista". Por este motivo, recuerdan, los problemas visuales afectan a su capacidad para adquirir los conocimientos. "Una mala visión está detrás de gran parte del fracaso escolar", aseguran.
FRENAR LA MIOPÍA EN NIÑOS Y ADOLESCENTES
La miopía es un defecto refractivo que afecta a la visión de lejos, y cada vez más niños y adolescentes la desarrollan, en parte debido por los factores ambientales.
Según Federópticos, realizar menos actividades al aire libre y el uso excesivo de dispositivos digitales y de la visión de cerca están contribuyendo al incremento de la miopía y al desarrollo de la misma en edades cada vez más tempranas.
Asimismo, el cuidado de la alimentación también es "básico" para mantener una buena salud visual. En la dieta no debe faltar la vitamina D y es recomendable evitar las grasas saturadas y el colesterol.
A la hora de realizar los deberes o mientras leen, se debe mantener una distancia al papel de unos 30 o 40 centímetros y es conveniente que dispongan de una buena iluminación. "En cuanto a los dispositivos móviles, hay que limitar el tiempo de uso y evitar que pasen horas frente a la pantalla de ordenadores, tabletas o teléfonos móviles", comentan.
Además, las familias de niños y adolescentes con miopía deben promover las revisiones visuales periódicas para conocer el estado de la visión de los pequeños, determinar el desarrollo de la miopía y adoptar, cuando sea preciso, las medidas necesarias para frenarlo.
CÓMO FRENAR LA MIOPÍA
El desarrollo de la miopía puede degenerar en miopía magna (más de 6 dioptrías), que multiplica la posibilidad de padecer patologías oculares en la vida adulta y, en el peor de los casos, puede provocar pérdida de la visión.
En este sentido, Federópticos recuerda que hoy en día es posible frenar el avance de la miopía utilizando diferentes tipos de lentes.
Las lentes oftálmicas de desenfoque periférico han demostrado su eficacia al detener el aumento de la miopía durante la infancia y la adolescencia. "Son muy cómodas, ya que se fabrican a medida de la ergonomía visual de cada usuario", explican.
Las lentillas de desenfoque miópico también permiten frenar la progresión de la miopía. Son fáciles de manejar por parte de los niños y les aportan una mayor libertad para realizar todo tipo de actividades.
Por otra parte, la ortoqueratología, que consiste en el uso de lentes orto-k, es una técnica reversible y segura que moldea la córnea durante el sueño y permite una visión nítida durante el día sin necesidad de utilizar gafas ni lentes de contacto.