MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los pacientes con cáncer que reciben medicamentos para el corazón sufren menos daños cardíacos, según una investigación liderada por el doctor Sergio Moral, del Hospital Universitari Josep Trueta y el Hospital Santa Caterina de Girona.
Según los resultados de esta investigación, presentada este miércoles en un congreso científico de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC, por sus siglas en inglés), por cada diez pacientes con cáncer de mama o hematológico tratados con medicamentos para el corazón, se podría evitar un caso de cardiotoxicidad.
"Nuestro estudio apoya el uso rutinario de betabloqueantes, inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (ECA) o bloqueadores de los receptores de angiotensina II (BRA) en pacientes que reciben tratamiento contra el cáncer, pero la decisión debe tomarse caso por caso", explica el doctor Moral.
Los avances en el tratamiento oncológico han mejorado la supervivencia de los pacientes con cáncer, pero al mismo tiempo, la enfermedad cardiovascular es uno de los efectos secundarios más frecuentes. La incidencia de problemas cardíacos varía según el medicamento, su dosis y las características del paciente, incluyendo la edad y la hipertensión.
Este estudio analizó las mejores pruebas científicas disponibles para examinar si el uso de betabloqueantes, inhibidores ECA y/o BRA estaba relacionado con la reducción de la incidencia de cardiotoxicidad en pacientes con cáncer de mama o hematológico que recibían tratamiento para el cáncer. La cardiotoxicidad se definió como la disminución de la función de la bomba cardíaca (disminución de la fracción de eyección del ventrículo izquierdo por debajo del 50 por ciento, o una disminución superior al 10 por ciento) y/o insuficiencia cardíaca manifiesta durante el primer año de seguimiento.
El metanálisis incluyó nueve ensayos controlados aleatorios. El tratamiento principal del cáncer en todos los estudios fue la quimioterapia con antraciclina; algunos también administraron tratamiento adyuvante como el trastuzumab. Se reclutó a un total de 913 pacientes, de los cuales 534 recibieron medicamentos para el corazón y 379 estaban en un grupo de control. De los 534 medicamentos cardíacos que recibieron, 337 tenían un betabloqueador, 152 tenían un inhibidor de la ECA o BRA y 45 recibían un betabloqueador e inhibidor de la ECA.
Durante el seguimiento de un año, 108 pacientes (12%) desarrollaron cardiotoxicidad. Los pacientes que recibieron tratamiento cardioprotector tuvieron un riesgo significativamente menor. "Los medicamentos cardioprotectores no se prescriben habitualmente en pacientes con cáncer y nuestro estudio sugiere que deben ser considerados", comenta el científico español.
El cáncer y las enfermedades cardiovasculares comparten factores de riesgo comunes que también influyen en la susceptibilidad a la cardiotoxicidad. En consecuencia, el experto aconseja a los pacientes de cáncer que se alimenten de manera saludable, dejen de fumar, controlen su peso y hagan ejercicio. "Se necesita más investigación para identificar qué pacientes se benefician más de la terapia cardioprotectora, qué medicamento es más efectivo y en qué dosis, y la duración óptima de la profilaxis", concluye.