MADRID 14 May. (EUROPA PRESS) -
La Farmacia comunitaria, "por su accesibilidad, profesionalidad y cercanía", puede detectar pacientes asmáticos que están haciendo un sobreuso de corticoides sistémicos y derivar al médico, han señalado experto reunido en la actividad formativa sobre el abordaje multidisciplinar del paciente asmático desde la farmacia comunitaria, organizada por el Consejo General de Colegios Farmacéuticos con el patrocinio de Astrazeneca.
En el transcurso del webinar, moderado por Natividad Calvente, directora de Innovación, Formación y Relaciones Institucionales del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Javier Pérez Fernández, médico de familia en el Centro de Salud La Calzada (Gijón) y miembro del Grupo de Respiratorio en Atención Primaria (GRAP) ha destacado el asma es una patología crónica que puede afectar a niños y adultos, siendo una de las enfermedades respiratorias de mayor prevalencia.
"El asma es una enfermedad inflamatoria bronquial. Nuestro objetivo terapéutico es el control de la enfermedad para evitar a corto plazo la aparición de agudizaciones respiratorias y a largo plazo el desarrollo de complicaciones y secuelas irreversibles", ha señalado este especialista, destacando la dificultad que existe en la continuidad de los tratamientos por parte de los pacientes, quienes suelen dejar la medicación de mantenimiento una vez que han superado el episodio asmático agudo.
Para el presidente del Comité de Asma de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica, Javier Domínguez Ortega, todos los profesionales sanitarios que participan en el proceso asistencial del tratamiento del asma tienen la responsabilidad de detectar aquellos pacientes que hacen un uso incorrecto de los tratamientos, así como evitar efectos secundarios y dosis de riesgo.
A este respecto, Domínguez destacó la grandísima ventaja que tienen las farmacias por su cercanía con los pacientes, por la empatía y la confianza que tienen en los farmacéuticos, a la hora de detectar pacientes que están haciendo un sobreuso de corticoides en asma, concienciar sobre ello, y derivar al médico en estas situaciones. "Un paciente asmático bien controlado no debería acudir a terapias de rescate, pero si acude, un indicador de alerta a tener en cuenta es un máximo de 3 broncodilatadores al año por paciente", ha señalado este especialista.
Por su parte, Javier Plaza Zamora, vicepresidente 3 de SEFAC recordó la importancia de trabajar en mejorar la adherencia a los tratamientos en los pacientes asmáticos, identificando la existencia de diferentes conductas. Desde los pacientes erráticos que no siguen bien las indicaciones del dispositivo o por presentar olvidos o realizar vacaciones terapéuticas, hasta aquellos otros que solo creen o piensan que únicamente han de medicarse durante las crisis asmáticas. "E incluso hay pacientes que no son adherentes de forma deliberada por tener fobia a la medicación", ha explicado Plaza.
Asimismo, destacó la importancia desde la farmacia comunitaria de incidir en un correcto uso de los inhaladores por parte de los pacientes. "Los fallos en las técnicas de inhalación conllevan un mayor riesgo de hospitalizaciones y una mayor visita a urgencias por parte de los pacientes", ha afirmado Plaza quien añadió que la farmacia comunitaria y el farmacéutico, a través de los Servicios Profesionales Farmacéuticos Asistenciales puede realizar una gran labor, reforzando que no haya Problemas Relacionados con el Medicamento y mejorando la eficacia y seguridad de los tratamientos.