MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
Expertos reunidos en el primer encuentro sobre 'El rol del farmacéutico hospitalario en las Enfermedades Inflamatorias Inmunomediadas', organizado por AbbVie, han destacado el papel de la farmacia hospitalaria en los pacientes con enfermedades inflamatorias inmunomediadas (IMID, por sus sigas en inglés).
Se trata de un grupo de patologías que comparten una inflamación crónica sistémica, causada por una alteración del sistema inmune que puede afectar a distintos órganos. Entre las IMID se encuentran la artritis reumatoide, la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa, la psoriasis, la espondilitis anquilosante, la hidradenitis supurativa, el lupus o la uveítis.
En este sentido, los farmacéuticos hospitalarios intervienen en la selección de medicamentos, validación de la prescripción, detección de errores, dispensación y en la educación al paciente, monitorizando la efectividad y seguridad del tratamiento prescrito. Este escenario ha llevado, a su vez, a potenciar la figura de la Farmacia Hospitalaria en la medición de resultados en salud reportados por los pacientes con enfermedades inflamatorias inmunomediadas.
"La medición de resultados en salud utiliza cada vez más otras herramientas que miden la calidad de vida, las preferencias de los pacientes o la satisfacción con el tratamiento, junto con medidas farmacoeconómicas. Es un paso más en la evaluación global de la terapia, actualmente no evaluamos más allá del coste del tratamiento, y lo racional es llegar a conocer los resultados del tratamiento, si está haciendo el efecto que se espera. Otro escalón más es disponer de información sobre cómo perciben los pacientes el tratamiento y cómo influye en su calidad de vida", ha explicado el director de formación de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), Benito García.
COEXISTENCIA DE DOS O MÁS IMID
Con respecto a las IMID, existen alteraciones genéticas y factores de riesgo similares que justifican la co-ocurrencia de varias de estas enfermedades en el mismo individuo y, de hecho, cerca del 10 por ciento de estos enfermos es diagnosticado de dos o más IMID que coexisten. Por otro lado, las IMID comparten también un mayor riesgo de desarrollar similares comorbilidades, derivado de los efectos crónicos de la inflamación.
Asimismo, un tercio de estos pacientes tienen comorbilidades de naturaleza diversa, más habitualmente de tipo cardiovascular, metabólico y psiquiátrico, respectivamente. Desde un punto de vista terapéutico, responden a agentes farmacológicos dirigidos frente a moléculas clave comunes en las rutas inflamatorias.
"Uno de los principales retos que tenemos los farmacéuticos es ayudar al éxito terapéutico de estos pacientes que presentan estas complejas características. Por ello, entre nuestras responsabilidades destacan la de comprobar que el paciente conoce la dosis y el intervalo de administración, la de informar al paciente sobre la forma de administración según el dispositivo a utilizar, la de valorar la adherencia en función de la recogida de medicación y también, la de estimular la adherencias mediante nuevas tecnologías", ha recalcado García.
Por otra parte, los expertos reunidos han destacado la necesidad de un abordaje multidisciplinar "eficaz y eficiente", que demanda de las instituciones una respuesta organizativa diferente. En este sentido, han insistido en que el rol del farmacéutico en este abordaje multidisciplinar es clave ya que, a través de sus responsabilidades en relación con la adherencia, monitorización de eficacia y seguridad del fármaco y la educación del paciente los farmacéuticos hospitalarios contribuyen a mejorar la respuesta clínica de los pacientes.
"Los tratamientos son cada vez más complejos y cada día las necesidades de los pacientes aumentan. Esta situación necesita del enfoque multidisciplinar para dar una respuesta sostenible para el sistema y de calidad para atender a las expectativas de los pacientes. El farmacéutico de hospital dentro del equipo multidisciplinar permite abordar esta complejidad y facilitar el tratamiento individualizado de los pacientes, aportando sus conocimientos sobre los medicamentos, sus interacciones, la monitorización terapéutica, la información, con herramientas de estratificación que permitan ayudar más a los pacientes que más lo necesitan", ha apostillado el presidente de la Sociedad Madrileña de Farmacia Hospitalaria, Alberto Morell.