MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
Existe una creciente necesidad de nuevos antibióticos para ayudar a combatir la amenaza inminente de resistencia antimicrobiana. Según un nuevo estudio realizado por investigadores del Centro para la Dinámica de las Enfermedades, la Economía y la Política (CDDEP, por sus siglas en inglés), en Estados Unidos, con colegas de la Universidad de Oslo, Noruega, y otras organizaciones, entre 1999 y 2014, solo 25 antibióticos nuevos que representan nueve clases diferentes de antibióticos ingresaron en el mercado mundial. La mayoría de los antibióticos lanzados en este periodo de tiempo provinieron de compañías japonesas (11 de 25) o estadounidenses (6 de 25) y se lanzaron en Japón (7) o en Estados Unidos (12).
De los 25 antibióticos, 18 estaban destinados a tratar infecciones del tracto respiratorio adquiridas en la comunidad, 14 para infecciones de la piel y la estructura de la piel y 12 para infecciones del tracto urinario. Además, el 52 por ciento de los nuevos antibióticos estaban indicados para tratar infecciones causadas por bacterias resistentes, mientras que ninguno se centró en las bacterias gramnegativas, que son la causa de la mayoría de las infecciones no tratables.
DISPONIBILIDAD DE MEDICAMENTOS, MUY VARIABLE
Además de examinar el lanzamiento de nuevos antibióticos, los investigadores también rastrearon cómo se propagaron los medicamentos a través del análisis de las ventas mundiales de fármacos. Descubrieron que, dentro de los tres años posteriores a su introducción, los antibióticos podían llegar a 30 mercados nacionales y en 10 años a 70; pero la disponibilidad de medicamentos era muy variable y solo 12 de los 25 antibióticos habían registrado ventas en más de diez países.
Los antibióticos con la mayor disponibilidad geográfica en 2014 (ertapenem, linezolid, moxifloxacina y tigeciclina, que llegaron a más de 60 países) se originaron en compañías europeas o estadounidenses y se lanzaron en Europa y Estados Unidos. En general, los medicamentos lanzados en Japón presentaban menos probabilidades de estar disponibles en otros países, aunque los antibióticos destinados a tratar las infecciones causadas por bacterias resistentes a los medicamentos tienden a registrar una mayor distribución geográfica.
Este estudio, que se basó en revisiones de medicamentos nuevos y registrados de la Agencia Europea de Medicamentos, la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos, la Agencia de Productos Farmacéuticos y Médicos de Japón y la Organización de Control de Estándares de Medicamentos de India, analizó la distribución geográfica de los nuevos antibióticos, pero no evaluó la disponibilidad en términos de beneficio clínico.
Según Ramanan Laxminarayan, director del CDDEP, "antes de este estudio, se sabía poco acerca de la distribución geográfica y la disponibilidad de antibióticos tras su introducción en el mercado. Encontramos que muchos antibióticos nuevos no van más allá de unos pocos países y, por lo tanto, no están disponibles en muchos países. donde la necesidad es mayor".
"Los hallazgos pueden aportar información importante para las intervenciones actuales y futuras (incentivos económicos específicos, extensión de patentes y asociaciones público-privadas) dirigidas a atraer a los fabricantes al mercado de desarrollo de antibióticos", concluye este experto.