MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
La farmacéutica GlaxoSmithKline (GSK), encargada de comercializar la vacuna contra la meningitis B, confía en tener más dosis disponibles para España en el segundo trimestre de 2017 tras el retraso en el suministro que han experimentado desde principios de este año por un problema de fabricación.
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha incluido la vacuna en su listado de medicamentos con problemas de suministro después de que el laboratorio haya informado de problemas técnicos con su fabricación, que se suman a las dificultades de abastecimiento a nivel mundial, también para España, después de que la "fuerte demanda generada" haya superado las estimaciones realizadas por la compañía.
La vacuna, que está en el mercado con el nombre de 'Bexsero', no está incluida en el Calendario común de vacunación infantil del Sistema Nacional de Salud (SNS) pero se puede adquirir libremente en las oficinas de farmacia. De hecho, GSK aclara que estos problemas no afectan a las dosis que están actualmente disponibles en el mercado.
En este caso, el laboratorio ha comunicado a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) de que durante los primeros meses de este año se va a suministrar a las farmacias "en cantidades inferiores" por problemas de fabricación con dos lotes que iban a distribuirse en España.
En concreto, según han explicado a Europa Press fuentes del Ministerio, el suministro de uno de los lotes, del cual había unidades destinadas al mercado nacional, está sujeto al resultado favorable de una investigación durante su proceso de fabricación y a unidades de otro lote, también previsto para su distribución en España, que ha sido rechazado tras no pasar los controles establecidos.
No obstante, Sanidad ha aclarado que el suministro está garantizado en los centros de salud para los casos de riesgo, en los que sí está financiada por el SNS.
Fuentes de GSK han explicado a Europa Press que no hay fecha exacta para el restablecimiento del ritmo de suministro pero están trabajando con las autoridades, profesionales sanitarios y distribuidoras para "gestionar el suministro de esta vacuna de forma eficaz y minimizar el impacto que este retraso pueda ocasionar".
El Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (AEP) ha lamentado la "incapacidad" mostrada por el fabricante para suministrar las dosis de vacuna necesarias para cubrir la demanda de la población, y creen que "repercute negativamente" en su práctica clínica diaria y en la confianza de las familias ante sus recomendaciones, ya que "les resultará difícil, cuando no imposible, seguir".
De igual modo, el problema también preocupa a los farmacéuticos, por los "serios trastornos" que está generando a los pacientes y por la formación de listas de espera para adquirir este producto, según ha denunciado el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, que advierte de que "ni las familias ni el ejemplar modelo de farmacia se pueden permitir estos retrasos en el suministro por más tiempo".