MADRID, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Unión de Promotores y Empresarios del Vapeo (UPEV), Arturo Ribes, ha afirmado que "en España nada menos que más de 500.000 personas han dejado atrás el cigarro convencional con este dispositivo. En otros países, que han logrado reducir de manera efectiva las tasas de tabaquismo, cuentan con más de un millón de vapeadores gracias a las campañas de información propiciadas por diferentes instituciones".
El máximo representante de la patronal de este sector afirma que "el cigarrillo electrónico sirve exclusivamente para aquel fumador adulto que quiere dejar el tabaco de una forma eficaz". Así, lamentan que "las dudas respecto a ciertos aspectos que rodean al cigarrillo electrónico", mientras "n otros países de la OCDE como Inglaterra, o Francia, pero también en Nueva Zelanda, han apostado por el cigarrillo electrónico, introduciéndolo en sus políticas y campañas de sanidad".
Así, afirman en una nota que "los productos españoles y europeos garantizan los máximos estándares de seguridad gracias a la legislación vigente"; mientras que el sector "apuesta por una regulación de los puntos de venta con un sistema de licencias" donde solo se pueda vender el dispositivo en tiendas especializadas "garantizando que estos productos sean exclusivamente puestos a la venta para fumadores adultos".
Asimismo, destacan que se trata de productos que "están altamente regulados", y, sobre las tiendas especializadas de 'vapeo', recuerdan que tienen prohibida la entrada a sus establecimientos a personas que sean menores de 18 años para evitar la venta a los más jóvenes. De hecho, la venta a menores de edad de estos productos está prohibido bajo penas de hasta 10.000 euros de multa.
Sobre los vapeadores de un solo uso reconocen que todavía hay margen de mejora en la ley. "El sector aboga por limitarse su venta a los establecimientos especializados mediante un sistema de licencias en el vapeo de forma exclusiva dado que se garantizará de esta forma un mayor control sobre los mismos", explican.
Finalmente, el sector del vapeo no recomienda "en absoluto" la practica dual del uso del vapeador y el consumo de tabaco y sí "una disminución progresiva del volumen de nicotina consumido hasta lograr su absoluto abandono".