MADRID 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El uso de Sirolimus reduce el riesgo de cáncer en pacientes que han sido trasplantados de riñón, según los resultados de un estudio publicado en la revista de la 'American Society of Nephrology', informó hoy la compañía Wyeth en un comunicado.
Según Wyeth, en los últimos años ha aparecido una nueva clase terapéutica de inmunosupresores (fármacos que se administran a pacientes sometidos a trasplante para evitar el rechazo del órgano trasplantado), los inhibidores del mTOR, que han demostrado una actividad antitumoral en varios estudios experimentales.
A este respecto, el doctor Josep Campistol, director del ICNU del Hospital Clìnic de Barcelona, explicó que los resultados del estudio demuestran que el uso de Sirolimus reduce el riesgo de cáncer en estos pacientes trasplantados cuando se retira la ciclosporina A y se mantiene la terapia con Sirolimus.
Los resultados de este estudio tienen una enorme importancia, añadió el doctor Campistol, ya que el cáncer es la segunda causa de muerte prematura de los pacientes trasplantados renales, en los que la incidencia es 10 veces superior a la de la población general.
"Los tumores post-transplante son la causa principal de morbilidad y muerte asociadas con la inmunosupresión mantenida tras el transplante de un órgano", confirmó el doctor Campistol, quien subrayó que ofrecer a los receptores de transplantes de riñón un tratamiento basado en Sirolimus podría, por tanto, proporcionar a los pacientes una oportunidad para reducir el riesgo de que desarrollen cáncer tras un transplante renal exitoso.