MADRID 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
La terapia epigenética oral CC-486, de Celgene, aporta respuestas hematológicas en pacientes con síndromes mielodisplásicos (SMD), leucemia mielomonocítica crónica (LMMC) y leucemia mieloide aguda (LMA) que ya habían recibido previamente agentes hipometilantes (AHM), tal y como han mostrado los resultados de un análisis integrado de datos procedentes de tres estudios de fase I/II, presentados en la 58ª Reunión Anual de Hematología de la Sociedad Americana (ASH, por sus siglas en inglés).
En el análisis han participado un total de 35 pacientes, tratados previamente con AHM (22 de ellos con SMD, 2 con LMMC y 11 con LMA), a los que se les administró CC-486 en dosis de 120-600 miligramos (mg) durante 7 días, seguido de azacitidina subcutáneo, o 300 mg una vez al día (QD) o 200 mg dos veces al día (BID) de CC-486 durante 14 o 21 días (sin ciclo inicial de azacitidina vía subcutánea). Antes de recibir CC-486, 11 de ellos (31%) habían fracasado al menos un ciclo previo a AHM inyectable.
La mayoría (57%) ya había recibido más de 4 ciclos de esta terapia y cinco pacientes con LMA habían recibido AHMs para el tratamiento de un SMD previo. De los 25 pacientes cuyos resultados ya eran conocidos antes del estudio, 14 de ellos recayeron y 11 fueron refractarios a AHM. El número medio de ciclos con CC-486 fue de cinco.
Para todos los pacientes tratados con CC-486, la tasa de respuesta fue de un 38 por ciento. Ésta incluye remisión completa (RC), remisión parcial (RP) y recuperación hematológica completa (CRi, sólo en pacientes con LMA), HI y transfusión independiente (TI).
"Los resultados de este estudio sugieren que la exposición previa de AHM no imposibilita la respuesta a CC-486. La dosificación extendida y la hipometilación también pueden diferenciar CC-486 e inducir estas respuestas. A medida que miramos hacia nuevas opciones para pacientes con síndromes mielodisplásicos, leucemia mielomonocítica crónica y leucemia mieloide aguda, esta terapia epigenética oral merece una evaluación adicional", ha comentado el jefe de la sección de Síndromes Mielodisplásicos en el Centro del Cáncer MD Anderson en Houston, Guillermo Garcia-Manero.