'Reyataz' (BMS) evita a los pacientes con VIH tener que cambiar de tratamiento hasta dentro de 3 años

Actualizado: jueves, 11 noviembre 2010 16:18

Lo frecuente en esto pacientes es cambiar de terapia al cabo de un año por problemas de tolerancia

MADRID, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -

El tratamiento del VIH con atazanavir potenciado con ritonavir, comercializado por Bristol Myers-Squibb (BMS) como 'Reyataz', ha demostrado un alto grado de tolerancia y seguridad a largo plazo, ya que más de la mitad de los pacientes mantenían el control del virus después de tres años con esta medicación, cuando lo habitual de los antirretrovirales es que haya que cambiarlos con frecuencia.

Así se desprende de los resultados del último estudio con este fármaco presentado en el último Congreso Internacional sobre Terapia Farmacológica del VIH 2010, celebrado en Glasgow (Escocia), en el que han participado casi 1.300 pacientes que previamente al tratamiento con este inhibidor de la proteasa ya habían recibido otro tratamiento.

"Es complicado que los pacientes sigan con una misma pauta durante mucho tiempo", asegura el doctor Santiago Moreno, del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, quien añade que "la principal causa para cambiar de tratamiento sigue siendo la tolerancia".

De hecho, explica, entre el 30 y 40 por ciento de los pacientes que inician un primer tratamiento "se ven obligados a cambiarlo al cabo de un año", porcentaje que aumenta cuando ya ha habido una medicación previa.

Sin embargo, los últimos datos de 'Reyataz' muestran como este fármaco era utilizado por más de la mitad de los pacientes (53-56%) tres años después de iniciar su uso. De hecho, el tiempo medio de abandono era de 3,6 años.

El motivo de dicha interrupción suele ser la aparición de efectos adversos (11% de los casos), por una decisión consensuada (6%) o por falta de eficacia (6%). En cuanto a los efectos adversos, los más frecuentes fueron diarrea, trastornos renales y urinarios, ictericia y nauseas.

Además, advierte Moreno, "entre las causas de interrupción del tratamiento la hiperbilirrubunemia, que suele estar ligada al uso de atazanavir, motivó menos de un 1 por ciento de los abandonos"

Por su parte, el profesor Jan van Lunzen, del Centro Médico Universitario Hamburg-Eppendorf (Alemania) ha destacado que esta investigación ha permitido comprobar "en condiciones de práctica clínica real" que con esta terapia "se puede tener su virus bajo control hasta cinco años".