MADRID 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
La molécula belatacept, comercializado por Bristol-Myers Squibb (BMS) con el nombre de 'Nulojix', utilizada para prevenir el rechazo del órgano en pacientes adultos sometidos a trasplante de riñón, mejora la función renal, según los últimos datos presentados en el marco del congreso de la Sociedad Europea de Trasplantes (ESOT, por sus siglas en inglés) que se celebra estos días en Glasgow (Reino Unido).
"Belatacept inhibe la respuesta inmune y contribuye a preservar la función renal al año", ha explicado a Europa Press el doctor Josep Grinyó, del Hospital Universitario Bellvitge (Barcelona) quien ha participado en este congreso.
Grinyó ha detallado que "con este fármaco se produce una mejora de la función renal que es superior a los 15 mililitros por minuto y además se ha visto, a través de biopsias protocolo, es decir, de seguimiento, que existe una disminución del daño crónico, por lo que evita por una parte el deterioro de función renal y, por otra parte, preserva mejor la estructura del riñón".
El doctor ha especificado que estos resultados se vieron al año del trasplante y tras seguir este medicamento y han sido confirmados a los tres años.
Este medicamento beneficia a pacientes renales, específicamente a aquellos que pueden recibir un injerto de edad avanzada, ya que "ganar función renal en esos casos es importante porque la función renal que se consigue al principio, tras el trasplante, determina en parte el pronóstico del injerto del trasplante en sí y la función renal es un factor de riesgo 'per se' de complicaciones cardiovasculares", por lo que, para el experto, "preservando la función renal, se podrá mejorar la supervivencia a largo plazo del injerto y, por otra parte, atenuar el riesgo cardiovascular en estos pacientes".
Otra de las novedades presentadas durante esta cita, es que belatacept disminuye la aparición de anticuerpos contra el donante, es un efecto colateral importante, "por lo que en principio se podría preservar mejor el injerto", añade.
En opinión del doctor, "la aprobación de este fármaco en Europa ha supuesto una de las innovaciones más llamativas que se han producido en el campo de la inmunosupresión en los últimos diez años". Además, afirma que "este fármaco supone un avance y da la posibilidad de tener más alternativas de tratamiento para prevenir el rechazo sin tener que pasar por la nefrotoxicidad".
LOS RETOS DEL TRASPLANTE DE RIÑÓN
Grinyó asegura que "el principal reto es intentar conseguir más donantes porque hay un hiato entre las personas que esperan un trasplante de riñón y donantes efectivos".
El experto también señala como fundamental mantener baja la incidencia de rechazo agudo y preservar la función renal, y explica que "otro aspecto importante es mejorar el perfil metabólico de estos pacientes y el control de la hipertensión porque, a su vez, eso determina también un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular".
Asimismo, hay que mejorar la calidad de los trasplantes "para que duren lo máximo posible y evitar así que esos pacientes vuelvan a la diálisis y requieran un segundo trasplante con el consumo de órganos que esto representa", concluye el doctor.