MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio ha encontrado que no hay diferencia en los resultados de desarrollo y comportamiento de los niños que tienen convulsiones febriles después de la vacunación, los niños que tienen convulsiones febriles no asociadas con la vacunación y los niños que nunca han tenido una convulsión, según publica 'Neurology', la revista médica de la Academia Estadounidense de Neurología.
"Esta es una noticia tranquilizadora para los padres --señala la autora del estudio Lucy Deng, del Centro Nacional de Investigación y Vigilancia de la Inmunización (NCIRS) de Sydney (Australia)--. Una convulsión febril puede ocurrir después de la vacunación y, comprensiblemente, puede ser bastante angustiante para los padres. También puede hacer que los padres pierdan la confianza en futuras vacunas. Ahora, los padres se sentirán aliviados al saber que tener una convulsión febril después de la vacunación no afecta el desarrollo del niño".
El estudio comparó a 62 niños que tuvieron un ataque asociado a la fiebre dentro de las dos semanas posteriores a la vacunación con 70 niños que tuvieron un ataque asociado a la fiebre por otra causa y 90 niños sin antecedentes de ataques. Todos los niños que tuvieron convulsiones eran menores de 2 años y medio en el momento de la convulsión.
Las funciones cognitivas, motoras y del lenguaje de los niños fueron evaluadas por evaluadores de desarrollo certificados que no conocían el historial de convulsiones del niño. Su comportamiento también fue evaluado a través de cuestionarios completados por sus padres. Los niños con convulsiones fueron evaluados uno o dos años después de la convulsión.
Los investigadores no encontraron diferencias en el desarrollo, las habilidades de pensamiento o el comportamiento entre los niños que tuvieron convulsiones febriles después de una vacunación y los que tuvieron convulsiones febriles en otros momentos o aquellos que nunca tuvieron una convulsión.
"En un momento en que hay un resurgimiento global del sarampión y están surgiendo nuevas enfermedades, nuestros hallazgos son particularmente importantes para tranquilizar a los padres y proveedores sobre la seguridad de las vacunas", destaca Deng.
También resalta que varios otros factores no estaban asociados con tener problemas de desarrollo: convulsiones asociadas con fiebre antes de uno año de edad, una convulsión febril que dura más de 15 minutos o más convulsiones asociadas con fiebre después de la primera convulsión.