MADRID, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las dosis diarias de antidepresivos consumidas aumentaron un 14,7 entre 2012 y 2016 y un 6,16 entre 2014 y 2016, según la última edición del informe 'La Sanidad en cifras', elaborado por la Fundación Gaspar Casal para el Círculo de la Sanidad.
El trabajo ha añadido que el consumo de sustancias hipnóticas y sedantes también se incrementó en los mismos períodos, aunque a un ritmo menor: un 9,37 por ciento y un 2,89 por ciento, respectivamente.
"Las secuelas de la crisis se van diluyendo y, no obstante, este indicador no acusa retrocesos notables sino todo lo contrario. Es un resultado que destaca y que invita a la reflexión y el análisis en profundidad", ha destacado el informe.
La Organización Mundial de la Salud estima que la depresión es un trastorno mental que afecta a unos 300 millones de personas en todo el mundo. También avisa de que puede convertirse en un problema de salud "serio", especialmente cuando es de larga duración e intensidad moderada a grave, y puede causar gran sufrimiento y alterar las actividades laborales, escolares y familiares.
El Círculo de la Sanidad también apunta al "progresivo envejecimiento de la población y al estilo de vida actual, donde la soledad está cada vez más extendida" como causas de este aumento.
En concreto, el envejecimiento de la población "está detrás de buena parte de retos que tiene el Sistema Nacional de Salud porque genera un mayor número de pacientes con enfermedades crónicas y una mayor demanda asistencial en general", según el Círculo de la Sanidad.
"Hace que se tenga que trabajar con la vista puesta no sólo en el corto, sino también a medio y largo plazo, buscando siempre salvaguardar la calidad en la atención, lo que sin duda pasa por la sostenibilidad del SNS y tratar de aprovechar los recursos existentes de la mejor forma posible", ha indicado el presidente del Círculo, Ángel Puente.
A juicio de la entidad "se deben desplegar políticas públicas que aborden esta situación de manera holística, contando con todos los actores implicados: profesionales del sector público y privado, administraciones y pacientes".
El informe también incluye información relativa a la inversión, las listas de espera, la evolución demográfica, la morbilidad, la mortalidad, la caracterización sociodemográfica y de bienestar de la población, los estilos de vida y los determinantes biológicos y sociales.
Asimismo, contiene información específica por comunidades autónomas, algo "especialmente relevante", según la entidad, si se tiene en cuenta que la sanidad es una competencia transferida en una parte importante a las autonomías.