MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
Científicos del Centro Alemán de Investigación de Infecciones del Hospital Universitario de Colonia (Alemania) están trabajando en una inmunoterapia que apoya el tratamiento con antibióticos en la tuberculosis. En su estudio, han podido identificar una nueva proteína objetivo en las células inmunes humanas, que pueden inhibir los efectos destructivos de las bacterias de la tuberculosis.
El tratamiento de esta enfermedad todavía conlleva la ingesta de varios antibióticos durante un período de muchos meses. La creciente resistencia a múltiples fármacos del patógeno, además, complica este tratamiento prolongado, y los efectos secundarios a menudo conducen a una interrupción del tratamiento y altas tasas de mortalidad.
Estos científicos alemanes están buscando medicamentos que puedan inhibir la muerte celular inducida por tuberculosis (necrosis) y la consiguiente destrucción del tejido pulmonar. En contraste con atacar directamente a las bacterias con antibióticos, este tratamiento está dirigido al huésped y por lo tanto combate las consecuencias de la infección sin atacar directamente al patógeno.
El punto de partida para las investigaciones son los corticosteroides, un grupo de hormonas que se han utilizado con éxito como complemento del tratamiento de la tuberculosis durante décadas, como por ejemplo la dexametasona. Sin embargo, hasta ahora, su mecanismo de acción no había sido definido con precisión. "Ahora, hemos podido demostrar que los corticosteroides inhiben la muerte celular inducida por 'Mycobacterium tuberculosis' que puede apoyar el proceso de curación", explica uno de los investigadores, Jan Rybniker.
Una proteína llamada p38 MAP quinasa, que aumenta la liberación de hormonas inflamatorias e induce la muerte celular, desempeña un papel central en esta vía. "Hemos identificado una nueva proteína objetivo en esta quinasa que podemos inhibir con agentes activos. Ya se han probado numerosos inhibidores de la p38 MAP quinasa en ensayos clínicos sobre artritis reumatoide, enfermedad de Crohn y enfermedades pulmonares crónicas. Estas sustancias ahora también podrían usarse para el tratamiento de la tuberculosis", asegura.
Estos investigadores ahora pretenden utilizar el cribado para encontrar otras sustancias que puedan inhibir la muerte celular inducida por la tuberculosis mediante el bloqueo de la quinasa mencionada anteriormente. En colaboración con el Centro de Investigación Borstel, estas sustancias serán probadas posteriormente en modelos animales. Al hacerlo, los científicos esperan descubrir nuevos caminos en la inmunoterapia.