MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El surfactante Curosurf de Chiesi ha contribuido a salvar la vida de más de 4 millones de neonatos con síndrome de distrés respiratorio (SDR) en sus 25 años de historia.
Los nacimientos antes de la semana 37 de gestación se han incrementado notablemente en las últimas décadas. La prematuridad conlleva que algunos de los órganos vitales de los recién nacidos no se hayan desarrollado en su totalidad.
En cuanto al aparato respiratorio, la patología más frecuente en estos niños es el SDR, causado por la falta de maduración de los pulmones. Es una enfermedad con pronóstico grave que impide la respiración normal del neonato y aumenta el riesgo de padecer asma, EPOC u otras patologías respiratorias en la edad adulta. Para tratar este síndrome se administra surfactante pulmonar para evitar que los pulmones del recién nacido se colapsen e impidan una respiración normal.
Además, Chiesi ha diseñado un catéter expresamente para la administración de Curosurf en niños prematuros de forma mínimamente invasiva. "LISAcath aporta valor a los médicos y a los pacientes por encima del rendimiento para la compañía. La mejor prueba de ello es que la compañía pone en el mercado el catéter sin ningún coste para el sistema sanitario de salud y pensando únicamente en el beneficio de los niños prematuros", ha señalado el directo general de Chiesi España, Giuseppe Chiericatti.