Cardióloga advierte de que los anticoagulantes directos están "infrautilizados" en España: "Es una indignidad"

Archivo - La heparina se utiliza como anticoagulante, pero también como antiviral y anticanceroso.
Archivo - La heparina se utiliza como anticoagulante, pero también como antiviral y anticanceroso. - PIXABAY/CSIC - Archivo
Publicado: miércoles, 21 septiembre 2022 14:15

MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

La cardióloga Inmaculada Roldán, del Hospital Universitario La Paz de Madrid y miembro de la Sociedad Española de Cardiología, ha advertido de que los anticoagulantes orales de acción directa (ACOD) están "infrautilizados" en España, lo que ha calificado como "indignidad".

Así se ha pronunciado durante la VIII edición 'Impacto positivo del uso de ACOD en la prevención del ictus en nuestra sociedad', impulsado por la Fundación Freno al Ictus y celebrado en el Caixaforum de Madrid. Durante el encuentro, se ha puesto de manifiesto que España es el único país en Europa que no permite el uso de ACODs acorde a las guías de práctica clínica, pese a los buenos resultados económicos y sobre la salud de los pacientes.

"Para prevenir el ictus, es necesario utilizar los fármacos correctos de acuerdo a las guías, como es el caso de los ACOD. Pero en España no hay una correcta anticoagulación, no se previene el ictus correctamente y se están malempleando los fármacos, afectando a un millón de personas y sus familias", ha advertido la experta.

A su juicio, esto no solo implica "el mal empleo de una terapia excelente para prevenir el ictus", sino que pone de manifiesto que España "no tiene una sanidad equitativa para todos". "Algunas CCAA utilizan los ACOD de forma correcta y otras ni los huelen", ha añadido. Por ejemplo, en Asturias solo hay un 42,29 por ciento de penetración de los ACOD, mientras que en Cantabria un 72,91 por ciento.

En relación con la Unión Europea, la presencia de ACOD en España es muy deficiente (60,65%), tal y como demuestran los datos presentados por la experta. De hecho, Portugal tiene un 90 por ciento, al igual que Grecia. Le siguen otros países como Francia (85%) o Italia (83%). "A nivel global, España está en la cola, detrás de Colombia.

"Nuestros pacientes españoles no son tratados correctamente con la medicación adecuada para prevenir un ictus, y esto crea que el paciente esté maltratdo, y que el profesional sea intermediario de una Administración que está haciendo mal su trabajo y una sociedad que padece un agravio considerable. Es una inequidad que este país no puede permitirse", afirma.

En este mismo sentido se ha pronunciado el jefe de Servicio de Neurología en el Hospital Universitario de Albacete, Tomás Segura, quien ha incidido en que en España los ACODs tienen una implantación "muy inferior" a los países del entorno, y es quizá por ello que la disminución en la caída de ictus debidos a fibrilación auricular no ha sido tan notable. "Sin duda, esta situación conlleva un grave menoscabo para la salud de nuestros pacientes, pero también para las arcas del Estado", ha sentenciado, en referencia a los altos costes hospitalarios que conllevan los ictus.

De hecho, la médica de Atención Primaria Aurora García Lerín lo ha demostrado con cifras. "En comparación con los pacientes bien controlados, el mal control de la anticoagulación se asoció con un aumento de los 4.557 ictus isquémicos, 2.236 hemorragias mayores y con un total de 14.463 muertes por cualquier causa. Esto se tradujo en 86 millones de euros de gasto", ha expresado.

En suma, todos estos expertos han insistido en la importancia de eliminar el visado para la prescripción de fármacos para los ACODs, ya que da lugar a inequidades en el Sistema Nacional de Salud; así como una actualización del informe de posicionamiento terapéutico (IPT) de acuerdo a las evidencias científicas más recientes, y la ampliación de las condiciones de uso recogidas en el IPT.

Por su parte, el internista José María Fernández, presidente de la Sociedad Asturiana de Medicina Interna, ha indicado que los pacientes que más se benefician de los ACODs son los mayores, ya que son los que presentan en mayor medida FA. "El beneficio para el paciente y con ello para el sistema sanitario y el profesional es claramente más marcado con los ACODs tanto desde el punto de vista de la eficacia como de la seguridad. Esto se ha visto en las estadísticas, donde desde el uso de los ACODs han decrecido de forma significativa los ictus", ha abundado el doctor. De hecho, en pacientes de 75 años o más, los ACODs reducen los ictus isquémicos/embolismos sistémicos un 30 por ciento, sin presentar más hemorragias mayores que warfarina.

Finalmente, en representación de los pacientes, el presidente de la Federación Española de Asociaciones de Anticoagulados, Rafael Martínez, ha recalcado que desde la Federación llevan años luchando por que se anule el visado "ya que coarta que llegue el ACOD al paciente anticoagulado", expresa. "Se están usando criterios económicos, olvidándose de los criterios técnicos y científicos suficientemente avalados", ha criticado.

"Independientemente de que estemos bien anticoagulados, los pacientes tenemos que estar bien controlados", ha recordado Martínez, para detallar que, según un estudio de la Federación, más de 32.000 pacientes mueren al año por estar mal controlados. "La mayor parte de este mal control radica en la antivitamina K. El coste de no estar bien anticoagulado con sintrón es que ese paciente se muere", ha lamentado, para recordar que los ACODs no necesitan tantos controles. "En resumen, todo medicamento indicado se debe financiar", ha reclamado.

"Por ejemplo, sabemos que los anticoagulados con valvulopatías tienen que estar sujetos a sintrón (Antivitamina K), porque los ACODs no les vienen bien. Entonces, habrá que mejorar el trato de estas personas, con el autocontrol no reconocido en la cartera de servicios. No hay autocontrol posible en ninguna parte de España", ha denunciado.

Finalmente, la cardióloga de La Paz ha incidido en que la falta de uso de los ACODs en España "es un problema de Estado". "Es necesario que desaparezca el visado, y tiene que cambiar el informe de posicionamiento terapéutico, que impide una indicación libre. Se debe prescribir de forma libre, no nos sirve flexibilizarlo, para poder acabar con la inequidad entre las comunidades", ha insistido.