MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
Una de cada tres personas dicen que prefieren correr el riesgo de tener una vida más corta en lugar de tener que tomar una pastilla diaria para prevenir la enfermedad cardiovascular (ECV), según concluye un nuevo estudio en la revista 'Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes', de la Asociación Americana del Corazón.
Investigadores de la Universidad de California en San Francisco (UCSF) y la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, ambas en Estados Unidos, encuestaron a mil personas con una media de 50 años a través de Internet sobre cuánto tiempo estaban dispuestos a renunciar al final de su vida con tal de evitar tomar medicación diaria.
En la encuesta, también se les preguntó por la cantidad de dinero que pagarían y el hipotético riesgo de muerte que estaban dispuestos a aceptar para evitar tomar medicamentos para prevenir la enfermedad cardiovascular. Más del 8 por ciento de los participantes estaban dispuestos a renunciar a hasta dos años de vida para evitar tomar medicación diaria para la enfermedad cardiovascular; mientras que aproximadamente el 21 por ciento cambiaría entre una semana y un año de sus vidas.
Alrededor del 70 por ciento de los entrevistados dijo que no cambiaría ninguna semana de sus vidas a cambio de no tener que tomar una píldora diaria conta la ECV. Alrededor del 13 por ciento de los participantes reconoció que aceptarían un mínimo riesgo de muerte con el fin de no tener que tomar una píldora todos los días; un 9 por ciento dijo que arriesgaría un 10 por ciento de las posibilidades; y alrededor del 62 por ciento no estaba dispuesto a asumir ningún riesgo de muerte inmediata.
"Incluso ignorando los efectos secundarios de las píldoras, el acto de tener que tomar una pastilla diaria puede tener un gran efecto en la calidad de una persona de la vida", resume este experto. "Si tenemos en cuenta que muchos adultos ingieren numerosas píldoras, el efecto suele magnificarse en esa persona -detalla--. A nivel de la población, incluso para pequeñas reducciones en la calidad de vida como las encontradas en este estudio, ese efecto multiplicado a través de millones de personas puede tener grandes efectos sobre el coste-efectividad de ese fármaco para una población".
Alrededor del 21 por ciento afirmó que pagaría mil dólares o más para evitar tomar una píldora todos los días durante el resto de su vida, pero el 43 por ciento dijo que pagaría ninguna cantidad. "Lo que realmente estábamos tratando de medir es lo que el acto de tomar una píldora, es decir, obtenerla, acordarse de tomarla y tomarla realmente, interfiere en la propia calidad de vida", explica Robert Hutchins, autor principal y médico residente en el Departamento de Medicina de la División de Medicina Interna General de la UCSF.
Aunque Hutchins y coautores creen que éste es el mayor estudio hasta la fecha que cuantifica la utilidad de tomar estos medicamentos, señalan que la encuesta era hipotética. Los investigadores utilizaron un método de compensación de tiempo como su principal objetivo, con la apuesta estándar y la disposición a pagar como objetivos secundarios.
La técnica de apuesta estándar mide la preferencia de un individuo en situaciones de incertidumbre, en este caso, si algún día puede requerir medicamentos cardiovasculares y si los va a tomar o se arriesga a ECV o la muerte relacionada. Aunque la encuesta estipula que los participantes no tendrían que pagar por las pastillas y hace caso omiso de los posibles efectos secundarios, los investigadores no están seguros de que estos problemas no afectaran a las respuestas.
"Es importante señalar que nuestro estudio sólo mide preferencias de los individuos en un momento en el tiempo --matiza Hutchins--. Sin embargo, el hecho de que no hemos visto grandes diferencias nos da la confianza de que este efecto probablemente no sea grande". Los encuestados fueron un 59 por ciento mujeres y un 63 por ciento de raza blanca, con casi un tercio sin títulos universitarios y el 51 por ciento con ingresos de entre 25.000 y 75.000 dólares.
La utilidad promedio, el valor de tomar una sola píldora diaria para la prevención de las enfermedades cardiovasculares, como las estatinas o incluso la 'Aspirina', era de aproximadamente 0,990 a 0,994. La utilidad se refiere al valor potencial de los servicios de prevención, incluyendo la prevención de enfermedades, la rentabilidad, la calidad de vida y los efectos adversos.