MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Medicina Estética (SEME) ha colaborado en la elaboración del estudio Axis Pharma para conocer la situación de la Medicina Estética en nuestro país durante el año 2020, que evidencia que el médico estético en España tiene de media 12,7 años de experiencia.
"Esta cifra habla de profesionales experimentados, capaces de garantizar al paciente un servicio ético y seguro", asegura la SEME en un comunicado.
En cuanto al porcentaje de tiempo que dedican a cada ámbito, los tratamientos faciales siguen acaparando gran parte de su actividad (72%), seguidos de los corporales (22%) y otros (6%). Este último apartado engloba capilar (35%), nutrición (34%), cirugía vascular (9%) y dermatología (7%).
En los tratamientos faciales, la toxina botulínica ha sido el más relevante durante todo el año 2020: representa el 42% del total, seguida del ácido hialurónico (32%) y la calidad de la piel (20%)
El informe, en el que han participado 199 médicos estéticos, calcula que cada médico estético atendió en 2020 de media en un mes habitual a unos 173 pacientes. Es decir, una ratio mensual médico-paciente de 1/173. De ellos, 122 pacientes se trataron en el ámbito facial y 41 en el corporal.
La pandemia por la COVID-19 también ha tenido consecuencias en la actividad médica estética. Del informe se desprende que, durante el periodo de julio a septiembre de 2020, el 49 por ciento de los doctores experimenta un crecimiento del mercado por aspectos post-confinamiento: aumento de peso o piel cansada, entre otros, sobre todo por el retraso de los tratamientos programados en los dos meses anteriores (toxina, rellenos, modelación corporal).
Asimismo, aquellos médicos que vieron disminuir sus pacientes durante el año pasado, entre el 76 y el 93 por ciento, opinan que el coronavirus ha sido el principal motivo de esta reducción.