MADRID, 6 Mar. (EDIZIONES) -
Los malos usos de la toxina botulínica en algunos famosos han creado diversos mitos respecto a un tratamiento que, usado de forma correcta, puede aportar múltiples beneficios a la paciente, según ha asegurado la doctora del Hospital Vithas Nuestra Señora de América, María Teresa Truchuelo.
"Es cierto que la gente tiene una percepción negativa porque a veces se ven caras muy planchadas y sin expresión, pero realmente eso es una cuestión de técnica, si nosotros ponemos menos unidad y en los puntos correctos tendremos una expresión más natural y conseguiremos suavizar el gesto", ha aseverado.
Por este motivo, la experta ha intentado desterrar las falsas creencias relacionadas con este tratamiento, recordando que no tiene efectos secundarios y que sólo está contraindicado en aquellos casos "puntuales" de pacientes con problemas inmunológicos y, especialmente, los relacionados con la debilidad muscular.
1. El efecto se pasa al cabo de unos meses. No obstante, Truchuelo ha reconocido que al no haberse utilizado tanto el músculo, cuando vuelve a contraerse lo hace con menos fuerza y, con ello, la arruga no vuelve a estar tan marcada como antes del inicio del tratamiento.
DIFERENCIAS CON EL ÁCIDO HIALURÓNICO
2. No se parece al ácido hialurónico. "Lo que hace la toxina botulínica es disminuir la fuerza de la contracción del músculo y con eso mejora la arruga, mientras que el ácido hialurónico lo que hace es hidratar la piel a nivel de la dermis y estimular la síntesis de fibras de colágeno con lo cual rellena o incluso da volumen según la densidad del producto", ha informado.
En este sentido, la doctora ha asegurado que lo más habitual es combinar ambos tratamientos para actuar distintos puntos de acción y, de esta forma, rellenar la arruga y engrosar la dermis. Ahora bien, ha matizado que la intervención puede variar según la zona donde se quiera actuar, siendo más común el uso de la toxina botulínica en las patas de gallo y la frente, y el ácido hialurónico en el surco nasogeniano o las líneas de marioneta.
3. No sólo se recomiendan para mujeres en edad avanzada. Y es que, las mujeres jóvenes también pueden hacer uso de estos tratamientos estéticos. "La ventaja de empezar pronto es que prevenimos que la arruga no sea muy marcada y así evitaremos tener que utilizar otro tipo de técnicas, porque cuando la arruga ya es muy profunda, el bótox hay que combinarlo con otras cosas", ha señalado la experta.
4. Se puede aplicar durante años sin contraindicaciones. De hecho, sólo se necesita esperar un mínimo de tres meses entre una sesión y otra para que la piel "no se acostumbre".