MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
Estudiar los hábitos de sueño durante 21 días puede ayudar a mejorar el descanso, ya que es el tiempo que necesita el cerebro para incorporar o modificar un hábito, según han informados expertos del Grupo Lo Monaco.
Y es que, según la Organización Mundial de la Salud un 40 por ciento de la población no descansa bien, y según la Sociedad Española de Neurología entre el 20 por ciento y 48 por ciento tienen problemas a la hora de conciliar el sueño.
Además, las personas pasan durmiendo una media de 200.000 horas a lo largo de la vida, y la calidad del sueño repercute directamente en la salud y el bienestar. Por ello, y para analizar el sueño y poder así tomar medidas al respecto para mejorarlo, existen técnicas complejas como el polisomnograma (PSG) u otras menos costosas y autoinformadas como el Diario de Sueño, que permiten una evaluación de las características más importantes del sueño.
Asimismo, aplicando la teoría a los hábitos del sueño y con el objetivo de mejorar el mismo para no sufrir los efectos adversos de un descanso insuficiente o de mala calidad, los expertos de la Cátedra de Investigación del Sueño de la UGR-Grupo Lo Monaco han recomendado realizar un análisis primario a través del Diario de Sueño.
En concreto, el documento recopila factores como el dormir solo o acompañado, las horas de acostarse y despertarse, o cuántas veces y durante cuánto tiempo se ha desvelado durante la noche o la firmeza del colchón. La compilación de estos datos durante tres semanas, junto a la masa corporal, altura o posibles dolencias es fundamental a la hora de elegir el colchón, factor clave de nuestro descanso.
En consecuencia a la valoración de estos estudios, el Grupo Lo Monaco ha lanzado '21 noches', una iniciativa que da la posibilidad de probar el colchón elegido durante 21 días en casa, pudiendo así compaginarlo con los hábitos de sueño y concluir tras ese periodo si efectivamente el colchón ha contribuido a la calidad del descanso del usuario.
