MADRID 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
La demanda de injertos de barba ha aumentado más de un 100% en los últimos 10 años, señala el director médico y experto en salud capilar de Svenson, Ignacio Sevilla.
Además, el experto se apoya en la encuesta clínica de la International Society of Hair Restoration Surgery para afirmar que este aumento se debe a temas estéticos, al aumento de visibilidad en redes sociales y a la mayor aceptación de tratamientos estéticos en el género masculino.
En este sentido, los pacientes acuden a estos tratamientos por motivos como la baja densidad de vello facial o falta de vello desde la pubertad, deseo de tapar cicatrices o marcas en la cara, deseo de una barba más densa y poblada para adaptarse a las tendencias actuales o en casos de pacientes transgenero que desean obtener unos rasgos faciales más masculinos, señala la compañía especializada en transplantes capilares, Svenson.
En cualquier caso, el experto apunta que lo importante para que el tratamiento funcione es que la zona donante, que suele ser la zona occipital del cuero cabelludo, tenga buena calidad y densidad. Además, señala que se trata de un procedimiento con asesoramiento personalizado "para ofrecer el mejor resultado posible en función de la fisionomía facial, la densidad disponible en la zona donante y las preferencias del propio paciente".
En cuanto a los plazos de recuperación del paciente, Sevilla advierte que todo aquel que quiera realizarse el implante debe saber que la inflamación de la zona facial va a durar entre 7 y 10 días, además de costras en la zona de los implantes, que desaparecen en un plazo aproximado de 15 días. Una vez pasado el primer mes, el vello trasplantado se cae y es a partir del segundo a tercer mes cuando empieza a crecer la barba. "Los resultados empezarán a ser definitivos entre el noveno mes y el año desde el tratamiento", expone.
"El injerto de barba se trata de un procedimiento mínimamente invasivo. Desde Svenson, nos aseguramos de que el proceso sea lo menos doloroso posible para nuestros pacientes, realizando la intervención con anestesia local y, una vez finalizada la intervención, intentamos controlar las leves molestias que se puedan notar con analgésicos o antiinflamatorios", añade Sevilla.
CUIDADO Y MANTENIMIENTO DE LA BARBA
Para aquellos que no necesitan un injerto pero están interesados en cuidar y mantener su barba de la mejor manera posible, Sevilla recomienda lavar la barba todos los días utilizando productos con pH Neutro. Asimismo, de cara a evitar la sequedad, considera importante utilizar aceites hidratantes o bálsamos con argán o vitamina E. También, aconseja cepillar la barba todos los días para evitar enredos y distribuir el sebo natural generado en el vello facial.
Por otro lado, advierte que, en algunos casos, cuando se realiza el afeitado, se presenta foliculitis, que sucede cuando los folículos pilosos se inflaman y se manifiesta en forma de granos en la zona afeitada. Para minimizar su aparición recomienda cambiar las hojas de afeitar con frecuencia, afeitarse en la dirección del crecimiento del cabello, aplicar agua caliente antes del afeitado y productos hidratantes como el aloe vera después.