MADRID, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO) ha recomendado evitar comer turrón duro y emplear pinzas y útiles específicos para comer marisco y no abrir las piezas con los dientes.
En cuanto al turrón duro, aunque la SEDO ha reconocido que es más saludable por contener menor cantidad de azúcar, "puede provocar microfracturas en los dientes, dañar los aparatos ortodóncicos y romper los empastes". En el caso específico de las ortodoncias, ha aludido de igual forma a las peladillas o las almendras garrapiñadas.
"Si se despega un 'bracket', una banda o un arco se sale del sitio, comer con normalidad será muy complicado", ha explicado la sociedad. En caso de ocurrir lo expuesto, la SEDO ha aconsejado llamar "inmediatamente" al ortodoncista para que solucione el problema "cuanto antes".
De forma paralela, si se come turrón duro, la SEDO ha instado a "extremar" la limpieza oral después de hacerlo y emplear un irrigador bucal que ayude a eliminar los restos que hayan quedado incrustados. "De lo contrario las partes más pegajosas y duras se pueden quedar escondidas entre las encías y los 'brackets', lo que puede acabar provocando una inflamación", ha indicado la sociedad.
En referencia al marisco, abrir las patas o cualquier elemento duro con los dientes, ya sea aquellos que llevan ortodoncia como los que no, "puede dañar el esmalte y astillar o fracturar las piezas dentales", ha dicho la SEDO.
Los pacientes de ortodoncia, asimismo, deberán intentar evitar alimentos como frutos secos, patatas y 'snacks' crujientes. La piña "también suele tomarse en estas fiestas, pero es muy filamentosa, por lo que después de comerla hay que ser muy cuidadosos con la limpieza de la boca", han incidido. "Las personas que llevan 'brackets' o implantes pueden tomar, aunque con moderación, turrón blando y de chocolate, así como polvorones, frutas escarchadas o mazapán", ha matizado la sociedad.
Por otra parte, la SEDO ha aconsejado evitar el picoteo por las caries. "La probabilidad de caries aumenta cuando el pH de la boca baja a 5,5. Estar todo el día comiendo mantiene la acidez baja, por eso picar entre horas aumenta el riesgo de caries. Si se va a tomar dulces es mejor hacerlo durante las comidas en lugar de estar picoteando constantemente", ha señalado la Sociedad Española de Ortodoncia.
En cuanto al alcohol, es mejor decantarse por el vino tinto, según la SEDO, porque el blanco y el cava "son más agresivos para el esmalte y para el cemento de la raíz dental". "También es frecuente que los niños sustituyan el agua por zumos o bebidas carbonatadas que, además de contener azúcar, tienen ácidos que pueden desgastar el esmalte dental. En la medida de lo posible, que tomen leche y agua", ha agregado la sociedad.
Además, la SEDO ha recordado que, "a pesar del cambio de rutinas tan habitual en estos días", no deben olvidarse las rutinas de higiene oral. "Si vas a comer fuera de casa, lleva, por lo menos, un cepillo de viaje contigo, pero idealmente un 'kit' de higiene dental con colutorio específico y seda dental", ha explicado.
Si no se lleva ortodoncia y se ha olvidado el 'kit' dental, puede masticarse chicle sin azúcar después de las comidas, según la SEDO, ya que favorece la producción de saliva y neutraliza la acidez de los alimentos.
También resulta de utilidad masticar algunos tipos de fruta dura como la manzana, aunque para que ejerza ese efecto de limpieza lo ideal es comerla a mordiscos para que realice un 'barrido' que limpie la superficie de los dientes y al masticarla se estimule la producción de saliva, que protege la boca frente al ataque de las bacterias, ha puntualizado la sociedad.
Con aparato, "además del cepillo, se debería llevar un pequeño neceser con un colutorio con flúor, cepillos interdentales para eliminar los restos que se quedan atrapados y/o seda dental específica para 'brackets', ha concluido la SEDO.
SI SE VIAJA
Por otra parte, la SEDO ha revelado que las ortodoncias no pitan en los arcos de seguridad del aeropuerto. "Se puede viajar con total tranquilidad en avión, porque ni 'brackets' ni implantes pitan en los controles de seguridad", ha confirmado el presidente de la Sociedad Española de Ortodoncia, Juan Carlos Pérez Varela.
La razón hay que buscarla en que, aunque los sistemas de control de los aeropuertos pueden detectar todos los tipos de metales, están regulados para detectar metales concretos y en las cantidades y densidades que buscan porque "de lo contrario, pitarían cada vez que pasa una persona, volviéndose ineficaces porque no servirían de filtro", ha explicado la SEDO.
Como algo excepcional, cuando un aparato es nuevo y está recién instalado, hasta que los especialistas lo regulan del todo puede suceder que al inicio esté más sensible de lo habitual, con lo que, "en casos rarísimos, podría pitar alguno de estos elementos", ha matizado la sociedad.
"En caso de que así sea, la solución en el caso de los 'brackets' es tan sencilla como sonreír, abrir la boca y mostrar la ortodoncia. En el caso de los implantes, como no se distinguen de las piezas normales a simple vista, la Guardia Civil pedirá el contacto del ortodoncista u odontólogo" para que lo confirme". "Pero este supuesto es altamente infrecuente y excepcional, por lo que se puede viajar con ortodoncia con total tranquilidad", ha hecho hincapié la SEDO.