MADRID, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las mujeres que usan productos de tinte permanente para el cabello para teñirse en casa no experimentan un mayor riesgo de padecer la mayoría de los cánceres ni una mayor mortalidad relacionada con el cáncer, según un estudio publicado este miércoles en la revista 'The BMJ'.
Sin embargo, si bien esto debería ofrecer tranquilidad general a las usuarias de tintes permanentes para el cabello, los autores dicen que sí encontraron un ligero aumento en el riesgo de cáncer de ovario y algunos cánceres de mama y piel. También se descubrió que el color natural del cabello afecta la probabilidad de algunos cánceres.
El uso de tintes para el cabello es muy popular, especialmente entre los grupos de mayor edad que desean disimular las canas. Por ejemplo, se estima que lo utilizan entre el 50 y el 80% de las mujeres y el 10% de los hombres de 40 años o más en los Estados Unidos y Europa.
Los tintes para el cabello más agresivos son los de tipo permanente y representan aproximadamente el 80% de los tintes para el cabello utilizados en Europa y Estados Unidos, y una proporción aún mayor en Asia.
Si bien la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud ha clasificado la exposición ocupacional a tintes para el cabello como un carcinógeno probable, no hay ninguna advertencia sobre su uso en casa porque la evidencia existente no es concluyente.
Para comprender mejor el riesgo de cáncer por el uso de tintes personales para el cabello, los investigadores analizaron datos de 117.200 mujeres del 'Nurses Health Study', con base en el Brigham and Women's Hospital de Boston, un gran estudio de cohorte prospectivo, que incluye evaluaciones de exposición al tinte del cabello. Las mujeres no tenían cáncer al comienzo del estudio y se les dio seguimiento durante 36 años.
Los resultados no mostraron un mayor riesgo de la mayoría de los cánceres o de muerte por cáncer en las mujeres que informaron haber usado tintes permanentes para el cabello en comparación con las que nunca los habían usado.
El uso de tinte para el cabello no aumentó el riesgo de cáncer de vejiga, cerebro, colon, riñón, pulmón, sangre y sistema inmunológico, o la mayoría de los cánceres de piel (carcinoma cutáneo de células escamosas y melanoma) o de mama (receptor de estrógeno positivo, receptor de progesterona positivo o receptor de hormonas positivo).
Pero el uso constante de tintes permanentes se asoció con un riesgo ligeramente mayor de carcinoma de células basales de la piel, y este riesgo fue mayor en mujeres con cabello naturalmente claro.
Un mayor riesgo de tres tipos de cáncer de mama (receptor de estrógeno negativo, receptor de progesterona negativo y receptor de hormonas negativo) y cáncer de ovario también se relacionó con el uso de tintes permanentes, y el riesgo aumentaba según la cantidad acumulada de tinte a la que estaban expuestas las mujeres.
También se observó un mayor riesgo de linfoma de Hodgkin con el uso de tinte para el cabello permanente, pero solo en mujeres con cabello naturalmente oscuro.
"Las posibles explicaciones podrían ser que los tonos de los tintes para el cabello permanentes están asociados con la concentración de ingredientes, y los colores más oscuros tienen concentraciones más altas", explica los autores.
Este es un estudio observacional, por lo que no se puede establecer la causa. Pero los autores dicen que sus hallazgos "ofrecen cierta tranquilidad frente a las preocupaciones de que el uso personal de tintes permanentes para el cabello pueda estar asociado con un mayor riesgo de cáncer o mortalidad". No obstante, agregan que las asociaciones positivas de algunos cánceres con diferentes tipos de color de cabello justifican una mayor investigación.