MADRID, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
La alopecia femenina de tipo androgenética, asociada a una sensibilidad aumentada de la raíz del folículo piloso a la hormona testosterona, suele aparecer después de la menopausia, pero cada vez se detectan más casos de mujeres que comienzan con este afinamiento del cabello, conocido a nivel médico como miniaturización, a edades más tempranas, según la dermatóloga especialista de la Unidad de Regeneración Capilar de Ruber Internacional Paseo de la Habana, Alba Gómez.
Para diagnosticar la alopecia androgenética, se realiza una exploración física del cuero cabelludo y los tallos pilosos, así como de sus raíces y facilidad para desprenderse mediante tricoscopia digitalizada trichoscan.
"Esta tecnología permite analizar el origen real de la pérdida capilar. Se trata de un "análisis digitalizado que mide de manera no invasiva la densidad del cabello", relata la doctora Alba Gómez.
La solución pasa por la administración de fármacos o el trasplante capilar que, pese a la creencia popular, no conlleva necesariamente el rasurado del cabello. Ante la variedad de tratamientos eficaces existentes, la consulta precoz es clave para la prevención y regeneración del problema capilar, que debe ser realizada por los especialistas en este tipo de patologías.
En este sentido, una vez diagnosticado el tipo de alopecia, la Unidad de Regeneración Capilar ofrece diferentes formas de tratamiento. Principalmente, la mesoterapia capilar, la mesoterapia plaquetar o el trasplante Capilar Non Shaven FUE.
Para Gómez, la mesoterapia capilar se trata de una fórmula individualizada que combina varios fármacos y sustancias regeneradoras testadas científicamente. Esta se inyecta mediante pequeñas infiltraciones en el cuero cabello sin necesidad de anestesia, por lo que penetra de forma directa sobre los folículos pilosos.
Por otro lado, la mesoterapia plaquetar destaca por la intensa regeneración celular que genera el plasma. Según explica la dermatóloga, el proceso es sencillo, "ya que este se extrae de una pequeña muestra de sangre de las pacientes y se inyecta en pequeñas infiltraciones en la dermis del cuero cabelludo para estimular la regeneración tisular y el crecimiento del folículo piloso".
Finalmente, el trasplante capilar Non Shaven FUE permite una extracción individual de folículos de diversas áreas sin necesidad de rasurar la zona donante. "Esta técnica menos invasiva de las unidades foliculares no requiere sutura y su curación se produce de forma espontánea, sin cicatriz visible posterior", puntualiza.
EFLUVIO TELÓGENO
Además de la alopecia androgenética, otro tipo de caída capilar tiene que ver con el efluvio telógeno. Es, en el 90 por ciento de los casos, un tipo de caída autolimitada, que cederá en un periodo de entre tres y seis meses, cuando la renovación generalizada del cabello por esta influencia de factores externos en su ciclo vital se haya completado.
Sin embargo, esto no significa que se prescinda de la atención de un especialista, ya que, según Gómez, "se debe proporcionar un correcto diagnóstico en primer lugar y aportar todas las herramientas de tratamiento para que la caída ceda en el menor tiempo posible".