MADRID 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
Existen ciertos alimentos que ayudan a contrarrestar los ácidos de la boca y fortalecen el esmalte como el chocolate, el té verde sin azúcar o el queso curado, gracias a sus propiedades antioxidantes, sin embargo, otros como los cítricos, las comidas crujientes, así como los de textura pegajosa pueden dañar seriamente el esmalte, ha informado la clínica Vitaldent.
En este sentido, el director médico del centro, Gustavo Camañas, ha advertido de que hay que extremar la precaución con los dulces de consistencia dura, como caramelos y turrones duros, ya "que además su textura puede provocar la rotura de una pieza o erosión del esmalte"; con el hielo, ya que "masticarlo puede sensibilizar los dientes, además de dañar el esmalte"; y con los cítricos, que "erosionan el esmalte y hacen que la boca sea más propensa a padecer caries a largo plazo".
Asimismo, ha alertado de que consumir en exceso café y té "puede provocar sequedad bucal, además de antiestéticas manchas dentales". También los alimentos de textura pegajosa pueden perjudicar el esmalte, porque "permanecen en la boca más tiempo del deseado pudiendo dar lugar a la aparición de caries"; así como los alimentos crujientes, como las patatas fritas, ya que "el almidón tiende a quedarse atrapado entre los dientes", ha apuntado.
"No se trata de dejar de comer estos alimentos, si no de lavarse los dientes inmediatamente después de su ingesta", ha aclarado el experto. La excepción es el caso de los cítricos, ya que tras su ingesta "se debe esperar una media hora antes de efectuar el cepillado para no perjudicarlos", ha matizado.
EVITAR UN CEPILLADO DEMASIADO DURO
De cara al cepillado, el especialista ha indicado que se debe evitar un cepillo demasiado duro, ya que "puede dañar los dientes tanto como el café o el tabaco". Esto se debe a que un cepillado con cerdas demasiado duras desgasta el esmalte, que tiene una tonalidad blanca, "haciéndolo más fino y provocando que se vea la dentina". Además, puede dañar las encías, "provocando su retracción y quedando expuesta la raíz de la pieza dental, lo que puede generar otros problemas", ha agregado.
Finalmente, Camañas ha comentado que beber mucha agua y té verde sin azúcar, que es rico en flúor y compuestos antioxidantes, "también ayuda a combatir la caries". Asimismo, ha señalado que el queso curado "ayuda a contrarrestar la acción de los ácidos producidos por los alimentos ricos en carbohidratos, lo que favorece la limpieza natural de los dientes y los protege contra la desmineralización".