MADRID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un 25 por ciento de los españoles no siempre usa jabón para lavarse las manos, según se desprende del informe 'La higiene en la nueva normalidad: Impacto de la COVID-19 en la percepción y hábitos de higiene de los españoles', elaborado por la compañía Essity.
Además, y aunque para 8 de cada 10 personas el lavado de manos es esencial en su rutina de higiene básica, éste sigue sin realizarse de la forma adecuada, dado que solo un 55 por ciento de la población se lava las manos durante 20 segundos.
El informe, que recopila los datos de dos encuestas realizadas antes y después de la pandemia del coronavirus, forma parte de la 'Iniciativa Essentials', con la que Essity analiza y pretende aumentar la conciencia sobre la importancia de la higiene y la salud y su vínculo con el bienestar.
"En Essity trabajamos para mejorar el bienestar de millones de personas en todo el mundo. Los resultados de este informe nos ayudan a comprender el impacto de la crisis sanitaria en nuestra forma de entender y relacionarnos con la higiene. Con estos datos nuestro objetivo es plantear iniciativas que aumenten la conciencia de todos los ciudadanos y contribuyan a aumentar también la educación en hábitos de prevención y mejoren el bienestar de toda la sociedad", ha dicho la country manager de Essity Iberia, José Ramón Iracheta.
Asimismo, el trabajo ha puesto de manifiesto que un 84 por ciento de los españoles afirma haber incrementado la frecuencia con que se lava las manos con agua y jabón, hemos pasado de 5 a 10 lavados diarios de media. Además, 7 de cada 10 personas afirma lavárselas continuamente a lo largo del día, especialmente tras haber tocado superficies fuera de casa (88%), estar manipulando comida (71%), haber usado el transporte público (70%) o después estornudar, toser o tocarse la nariz (76%).
Destaca la percepción sobre la propia responsabilidad, porque el 81 por ciento afirma lavarse las manos suficientes veces al día. Al mismo tiempo, existe cierta desconfianza de que el resto de los ciudadanos cumplan con las medidas de prevención, dado que solo 4 de cada 10 piensa que los demás lo hacen de igual forma.
Si bien los españoles tienen la costumbre de lavarse las manos en situaciones que podrían conllevar contagio, algunos todavía carecen del hábito en contextos importantes como al compartir dispositivos electrónicos (solo el 34% lo hace antes y el 58% después) o viajar en taxi (un 32% y 56%, respectivamente). Lo mismo aplica a otras situaciones como el cuidado de niños o personas enfermas (solo 1 de cada 4 lo hace antes y un 24% de la población tampoco lo hace después).
Las autoridades sanitarias recomiendan el uso de gel desinfectante como alternativa al agua corriente y jabón, sin embargo uno de cada tres encuestados piensa que el gel hidroalcohólico es más efectivo y un 23 por ciento suele optar por esta opción en lugar de lavarse las manos. El secado también es una asignatura pendiente ya que únicamente un tercio de las personas suele secarse las manos tras el lavado.
"La responsabilidad individual en materia de prevención es clave, no sólo para cuidar de nuestra salud y la de las personas que nos rodean, sino para frenar el contagio del virus y retomar en la medida de lo posible la normalidad del día a día. Los ciudadanos están cada vez más concienciados sobre la importancia de mantener una correcta higiene de manos, pero todavía queda camino por recorrer en materia de educación", ha añadido Iracheta.
CAMBIOS EN LA FORMA DE RELACIONARSE
Otra de las consecuencias de la pandemia es el cambio de hábitos cuando las personas se relacionan. En este sentido, el informe ha evidenciado que el 76 por ciento de los españoles ha dejado de estrechar la mano, el 73 por ciento ya no da besos para saludarse y el 72 por ciento no abraza a otras personas.
Las recomendaciones de distanciamiento social emitidas por las autoridades están siendo respetadas por la mayoría, aunque una cuarta parte de la población sigue sin renunciar al contacto físico. De hecho, y a pesar de que las reuniones familiares y de amigos se han determinado como una fuente habitual de contagio, solo un 21 por ciento de los españoles tiene previsto dejar de visitar a amigos o familiares.
Por otro lado, el trabajo ha revelado que el 80 por ciento de los españoles confía más en científicos y expertos en lo que se refiere a recomendaciones sobre salud y prevención de contagio del virus, seguido de su propio instinto (74%) muy por encima de políticos y agencias gubernamentales (41% y 42% respectivamente).
Asimismo, ocho de cada 10 españoles piensen que la responsabilidad de que se cumplan las medidas de higiene recae en los propios ciudadanos, por encima de gobiernos y compañías. La mejor medida preventiva para mejorar la higiene y salud en todo el mundo sería incrementar la financiación del sector sanitario según cuatro de cada 10 encuestados.
De los datos proporcionados por Essity también se extrae que la transparencia y el acceso a información sobre las instalaciones y productos que se utilizan es clave para recuperar la confianza de los ciudadanos. En concreto, un 81 por ciento de los encuestados se sentiría más seguro tocando ciertos objetos si supiera que han sido correctamente desinfectados, y el 74 por ciento se sentiría más seguro en los espacios públicos si tuviera información sobre sus prácticas de higiene.
Finalmente, los españoles esperan que se extremen las medidas de higiene en todos los espacios públicos, pero encabezan las lista los hospitales (74%), las residencias de ancianos (56%) y el transporte público (47%).