Presentación Proyecto DISSAR
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 22 mayo 2013 15:27

Expertos destacan la necesidad de que haya una mayor coordinación entre profesionales sanitarios para tratar a estos enfermos


MADRID, 22 May. (EUROPA PRESS) -

Los pacientes con artrosis gastan unos 2.554 euros al año en costes asistenciales y no asistenciales, con unos 50 días la duración media de cada uno de los tratamientos, según refleja el Proyecto Dimensión Sanitaria y Social de la Artrosis (DISSAR), realizado por diferentes especialistas tras participar en varios seminarios en los que se ha analizado, desde diferentes perspectivas, el impacto de la enfermedad.

La artrosis es una enfermedad que afecta a más de siete millones de españoles y que tiene un coste sanitario directo de 4.800 millones de euros. Además, y al margen de la carga económica, esta patología tiene un gran impacto desde la perspectiva laboral, los costes empresariales, la Seguridad Social y las familias.

De hecho, el 52 por ciento de los casos de incapacidad permanente están relacionados con la artrosis y, entre un 26 y un 37 por ciento de los trabajadores que la padecen se ve obligado a abandonar su puesto de trabajo. Por tanto, esta patología necesita un seguimiento continuo y una frecuencia asistencial alta, dado que es crónica, condicionante e invalidante.

Ahora bien, a pesar de que suele estar asociada a la edad, ya que el 80 por ciento de los pacientes tienen más 70 años, esta enfermedad está afectando cada día a un mayor número de personas --el 20% la padece--, como consecuencia del aumento de la obesidad en los jóvenes y la esperanza de vida de los adultos.

Ante este escenario, según ha explicado el miembro del Comité de Expertos del Estudio, Julio Sánchez Fierro, se hace necesario establecer pautas y recomendaciones para prevenir la enfermedad, intentar que su evolución sea lo "más lenta posible" y, por ende, que los constantes dolores que sufren los pacientes aparezcan "más tarde".

"Por este motivo, esperamos que el proyecto sea un altavoz desde el punto de vista social, sanitario y económico porque los siete millones de personas que lo padecen necesitan que les demos una respuesta integral y coordinada a su tratamiento", ha asegurado Sánchez Fierro.

En este sentido, el informe, tal y como ha comentado el médico especialista de Atención Primaria, Sergio Giménez, destaca la necesidad de que haya una mayor "coordinación" entre los niveles asistenciales ya que, ha lamentado, actualmente existe una gran "variabilidad" en los tratamientos que prescriben los médicos de familia a estos pacientes.

Por ello, el experto ha subrayado la importancia que tiene que se midan los resultados del tratamiento, que se auditen historiales clínicos, se creen registros de pacientes, se realicen evaluaciones económicas y se busque la excelencia y elaboración de guías y protocolos. Y es que, según ha recordado, la artrosis es una enfermedad sobre la que "giran otras muchas patologías" por lo que, ha apostillado, es un problema "sociosanitario de primera magnitud".

LOS MÉDICOS DE AP PRESCRIBEN PARACETAMOL DE FORMA "EXCESIVA"

"Nuestros pacientes no suelen estar satisfechos con el tratamiento y esto puede ser porque estamos centrados en atender los síntomas pero no atendemos a otros problemas muy importantes como la evolución de la enfermedad o la seguridad", ha recalcado el reumatólogo y miembro del Comité de Expertos, Jordi Monfort, quien ha asegurado que se está realizando una "prescripción excesiva" del paracetamol y de los antiinflamatorios.

A este respecto, el farmacólogo clínico, Alfonso Moreno, ha asegurado que existen "suficientes" fármacos para tratar la artrosis durante un largo tiempo y que, además, no suelen producir efectos secundarios. Es el caso de los Sysadoa, donde se encuentran el condroitín sulfato y el sulfato de glucosamina, y que consiguen retrasar los estadios iniciales de la enfermedad.

"Estos medicamentos alivian los síntomas, son muy seguros, frenan la progresión de la enfermedad y carecen de efectos secundarios, no como, por ejemplo, el paracetamol o los antiinflamatorios que han demostrado que su uso prolongado puede tener efectos adversos sobre la salud", ha apostillado.

Por último, y junto al tratamiento farmacológico, los especialistas han destacado la necesidad de cuidar el entorno familiar del paciente con el apoyo de los servicios sociales y sanitarios y el impulso a las respuestas de accesibilidad, en especial a través de la domótica. Asimismo, han subrayado la importancia de llevar a cabo hábitos de vida saludable y realizar ejercicio físico que consiga potenciar la musculatura.