MADRID 13 May. (EUROPA PRESS) -
El recorte del gasto farmacéutico anunciado este miércoles por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para tratar de paliar el déficit público supondrá un ahorro anual para el Sistema Nacional de Salud (SNS) de unos 1.050 millones de euros, gracias a la rebaja de los precios de los medicamentos no sujetos al sistema de precios de referencia.
Según ha explicado el secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, en declaraciones a Europa Press, esta medida ya fue contemplada por el ministerio y las comunidades autónomas en el último Consejo Interterritorial del SNS, celebrado el pasado 18 de marzo, donde se decidieron diferentes medidas para conseguir un ahorro de 1.500 millones de euros más para el sistema sanitario.
En esta ocasión, la rebaja de precios afecta a aquellos fármacos no sometidos al sistema de precios de referencia --los que llevan que menos de 10 años en el mercado y no son genéricos-- y se hará de forma escalonada y no lineal. Así, los medicamentos que lleven más tiempo en el mercado tendrán más rebaja y los que lleven menos tiempo tendrán menos.
Además, este recorte también beneficia al ciudadano "en lo que tiene que aportar" cuando compra un fármaco ya que, según señala Martínez Olmos, cuando hay que comprar medicamentos se paga el 40 por ciento de su precio, por lo que el ahorro estimado será de unos 51 millones de euros anuales.
La otra medida anunciada por Zapatero pretende lograr un consumo de medicamentos más eficiente y vinculado a las necesidades reales de los pacientes, adecuando el número de unidades de los envases de los medicamentos a la duración estandarizada de los tratamientos, de acuerdo a las indicaciones de la comunidad científica.
Según asegura Martínez Olmos, habrá algunos medicamentos que tendrán que adaptar sus presentaciones a las dosis que fijan las guías de práctica clínica aunque esto "no conllevará excesivos problemas de manufacturación" y, del mismo modo, ha asegurado que estas nuevas presentaciones "personalizadas" convivirán con las actuales.
Igualmente, asegura que la fabricación de fármacos en monodosis ya se lleva a cabo para que los hospitales los puedan utilizar en Urgencias o con los pacientes que se encuentran ingresados, lo que se conoce como envase clínico.
COMPRAR FÁRMACOS POR UNIDADES
De este modo, "el objetivo es que todos los medicamentos se puedan comprar en las dosis que considere el médico", una demanda que los profesionales sanitarios llevaban reclamando desde hace tiempo. En estos casos, el farmacéutico tendrá que dispensar las dosis que el médico haya recetado a cada paciente.
Con esta personalización de los tratamientos, Sanidad prevé un ahorro de unos 20 millones de euros anuales que "puede ser más en la medida en que se empiece a generalizar esta práctica".
Martínez Olmos ha reconocido que en la misma mañana de este miércoles han informado a Farmaindustria de esta medida, resaltando que "dada la caída de ingresos, hay que hacer sostenible el SNS, que es el principal cliente de la industria farmacéutica". "El objetivo es que la sanidad siga siendo viable en términos económicos sin tocar la calidad de sus prestaciones", añade.
