MADRID 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El uso de imágenes para enfatizar advertencias contra el consumo de tabaco en los paquetes de cigarrillos fue una de las medidas más controvertidas, sin embargo una investigación internacional -que ha contado con participación española- muestra lo acertada de esta iniciativa, ya que dichas fotografía reducen hasta un 80 por ciento el deseo de compra entre fumadores.
Lo cierto es que, según desprende el estudio publicado en 'Plos One', la introducción en las cajetillas de advertencias con imágenes sobre los riesgos del tabaco para la salud fue una medida de causo controversia pero que, dependiendo del país, ha tenido una incidencia en la reducción del consumo de entre el 5 y el 10 por ciento en diez años.
En Canadá, donde se dispone de datos desde hace una década, sugieren que la advertencia pictórica podría haber contribuido a la reducción de la prevalencia del tabaquismo en casi un 10 por ciento entre 2001 y 2009; mientras en Brasil, donde en los últimos 20 años la prevalencia de fumadores ha disminuido en un 50 por ciento, una simulación atribuye a las advertencias gráficas (introducidas también en 2001), al menos el 8 por ciento de esta reducción.
El estudio, financiado por la Comisión Europea, ha sido elaborado por Open Evidence, 'spin-off' de la Universitat Oberta de Catalunya, y por la Universitat Pompeu Fabra. Además, han participado investigadores de la Universidad Nacional de Colombia (Colombia), la Universidad de Milán y el CRENoS -Centro de Investigaciones Económicas del Norte del Sur en Italia; la Universidad de Leicester y la Escuela de Londres de Ciencias Políticas y Económicas en Reino Unido; y en Estados Unidos la Universidad de California Riverside, y la Universidad de Columbia.
Cuando las imágenes provocaron emociones como la vergüenza, la ira, la ansiedad y la angustia la respuesta tenía mucho más éxito en la reducción de las probabilidades de compra (en promedio en un 82%) que cuando las imágenes provocaron emociones como el miedo y el asco (en promedio en aproximadamente un 66%).
GRAN ESTUDIO EUROPEO
El informe se ha elaborado mediante una encuesta en 'on line' a 8.000 personas distintas de diez países europeos: España, Alemania, Bélgica, Dinamarca, Francia, Italia, Polonia, Reino Unido, Rumanía y Suecia. El informe ha querido ser una muestra real de la diversidad del continente y, por esta razón, se han escogido países mediterráneos, anglosajones, del este y escandinavos.
El objetivo de la encuesta era analizar qué emociones provocan a los ciudadanos (fumadores y no fumadores) las imágenes que se encuentran en los paquetes de tabaco, así como su deseo de compra y lo que estarían dispuestos a pagar.
Tras mostrar siete paquetes de tabaco con el mismo texto impreso, pero con fotografías distintas, se ha hecho evidente que las imágenes que desprenden emociones como vergüenza, indignación, ansiedad o angustia tienden a ser más eficaces que las que quieren evocar sentimientos de miedo o repugnancia.
En otras palabras, una fotografía donde aparece una madre con un bebé en brazos mientras fuma tiene un efecto más negativo que la de unos pulmones afectados por el humo inhalado o la de una persona enferma.
Según Francisco Lupiáñez, coautor del estudio y cofundador de Open Evidence, "se ha demostrado que las emociones que provocan las imágenes tienen un efecto claro en el deseo de compra. Es más, el estudio demuestra que se pueden medir los diferentes tipos de emociones y saber sobre cuáles se tiene que influir".