MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Comité de Emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha pedido a los países que no exijan pruebas de vacunación contra el COVID-19 para poder viajar "dado que todavía se desconocen las repercusiones de las vacunas en la reducción de la transmisión y que la disponibilidad actual de vacunas es demasiado limitada".
"En estos momentos, pedimos que no se introduzcan requisitos de prueba de vacunación o inmunidad para los viajes internacionales como condición de entrada, ya que todavía existen importantes incógnitas en cuanto a la eficacia de la vacunación para reducir la transmisión y la limitada disponibilidad de vacunas. Estar vacunado no debería eximir a los viajeros internacionales de cumplir otras medidas de reducción del riesgo de los viajes", ha establecido el comité, que se reunió este jueves 14 de enero a petición del director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
De la misma forma, los expertos han aconsejado a los países que aplicaran medidas "coordinadas y basadas en pruebas científicas" para viajar con seguridad y que compartieran con la OMS las experiencias y las mejores prácticas aprendidas.
"Estamos un poco paralizados. Estamos un poco confundidos. Y claramente la cuestión de viajar alrededor del mundo por aire, por carretera, por mar, necesita ser mejor organizada", ha reivindicado el líder de este comité independiente, Didier Houssin. El experto ha esgrimido que el mundo se enfrenta a "una carrera entre el virus, que va a seguir tratando de mutar para propagarse más fácilmente y la humanidad, que tiene que tratar de detener la propagación".
Este viernes, sin embargo, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha señalado que sería una "buena idea" contar con certificado mutuamente reconocido a nivel europeo que "facilitara la vida" a los ciudadanos que hayan sido ya vacunados contra el coronavirus, pero cree que es una reflexión con implicaciones jurídicas y políticas que deben discutir primero los Veintisiete.
El mandatario heleno, Kyriakos Mitsotakis, envió hace unos días una carta a Von der Leyen defendiendo la idea de crear una suerte de pasaporte para las personas que se hayan vacunado contra el virus, con el objetivo de facilitar que pudieran viajar sin restricciones dentro de la Unión Europea, en un momento en el que los Estados miembros imponen distintas restricciones a los desplazamientos, como la exigencia de PCR negativa o cuarentenas. El Gobierno español también se ha mostrado favorable a esta propuesta, que ahora rechaza este comité de expertos de la OMS.
Por otra parte, en el encuentro han examinado también las variantes emergentes del SARS-CoV-2. Al respecto, el comité ha pedido que se ampliara a nivel mundial la secuenciación genómica y el intercambio de datos, junto con "una mayor colaboración científica para abordar las incógnitas críticas". El comité ha instado a la OMS a que elabore un sistema normalizado para nombrar nuevas variantes que evitara los marcadores geográficos, esfera en la que la OMS ya ha comenzado a trabajar.
En cuanto a las vacunas, el comité ha subrayado la necesidad de un acceso equitativo a través del Servicio COVAX, puesto en marcha por la OMS para garantizar que la vacuna llega a todos los lugares del mundo, así como de la transferencia de tecnología para aumentar la capacidad de producción mundial.
En este sentido, el comité ha alentado a los fabricantes de vacunas a que proporcionaran rápidamente a la OMS datos sobre seguridad y eficacia para su inclusión en la lista de usos de emergencia. "La falta de esos datos es un obstáculo para garantizar el suministro oportuno y equitativo de vacunas a nivel mundial", señala el comité.
"ESTAMOS EN UN MOMENTO DECISIVO EN LA PANDEMIA"
"Este es un momento decisivo en la pandemia y me complació que el Comité de Emergencias pusiera un gran énfasis en el despliegue equitativo de las vacunas COVID-19", ha explicado Tedros en rueda de prensa desde Ginebra (Suiza) este viernes.
En este sentido, ha insistido en que "los profesionales sanitarios están agotados, los sistemas de salud están al límite de sus posibilidades y estamos viendo que los suministros de oxígeno se están agotando peligrosamente en algunos países".
"Ahora es el momento en que debemos unirnos como humanidad común y desplegar las vacunas a los trabajadores de la salud y a los que están en mayor riesgo. Esta es la clave para salvar vidas, proteger los sistemas de salud e impulsar una recuperación justa", ha reiterado.
Tedros ha asegurado la OMS está "trabajando duro" para "asegurar que las vacunas lleguen a los que más las necesitan". "Seguiré repitiendo esto en las próximas semanas, porque como dije el lunes, quiero ver la vacuna en marcha en todos los países en los próximos 100 días para que los sanitarios y las personas de alto riesgo estén protegidos primero", ha sostenido.
EL OBJETIVO: FRENAR LOS CONTAGIOS
El máximo dirigente del organismo sanitario internacional de Naciones Unidas ha señalado que en algunos países de Europa, África y América se están produciendo picos en los casos de COVID-19 con múltiples factores de riesgo de transmisión.
"Esto se debe a que colectivamente no estamos logrando romper las cadenas de transmisión a nivel comunitario o dentro de los hogares. Necesitamos cerrar la brecha entre la intención y la aplicación a nivel nacional e individual. Esto está ejerciendo una inmensa presión sobre los hospitales y los trabajadores de la salud", ha reclamado.
Tedros ha indicado que "cuanto más se suprima el virus COVID-19, menos oportunidad tiene de mutar". "Necesitamos ser más eficientes que el virus y alcanzar la excelencia en todo lo que hacemos. Solo hay una forma de salir de esta tormenta: compartir las herramientas que tenemos y comprometernos a usarlas juntos", ha argumentado.
"Se está produciendo una rápida aceleración de casos en países en todas las regiones. Una pequeña proporción es por las nuevas variantes, pero es sobre todo porque el coronavirus está aprovechando nuestra fatiga y la ruptura de las medidas de prevención. Hay que ser realistas. No lo estamos haciendo tan bien como deberíamos. No es fácil. Esperamos que las comunidades hagan sacrificios extraordinarios y los gobiernos deben apoyarlas de forma extraordinaria", ha agregado el director ejecutivo del Programa de Emergencias de la OMS, Michael Ryan.