PEKÍN, 18 Abr. (Reuters/EP) -
El Gobierno chino ha comenzado a estudiar la posibilidad de que la cepa H7N9, causante de un nuevo brote de gripe aviar en el país asiático que ya se ha cobrado 17 víctimas mortales, pueda transmitirse entre humanos, para lo que están examinando "grupos familiares" de las personas que han resultado infectadas.
De momento se han producido 82 casos y 11 de los fallecimientos se han producido en Shanghai. Pese a ello, según las autoridades, el número de casos puede aumentar dado que, aunque ya se ha ordenado sacrificar miles de aves, su contagio sigue siendo un misterio.
De hecho, según ha reconocido el director del Centro de Emergencias Sanitarias del Centro Chino para el Control y Prevención de Enfermedades (CDPCC, en sus siglas en inglés), Feng Zijian, ahora se está prestando "mucha atención" a posibles casos en grupos familiares.
Este nuevo análisis se produce después de un caso en una familia en la que el padre falleció recientemente y hay dos hermanos afectados. No obstante, apunta este experto, "hasta nuevos datos este caso no cambia nuestra creencia de que el virus se transmite de aves a personas", dijo Feng.
Los esfuerzos por determinar la naturaleza del virus H7N9 también se ven obstaculizados por la falta de información precisa de las víctimas y sobre si han tenido contacto con aves de corral, dijo Feng.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo el miércoles que un número de personas que han dado positivo por la nueva cepa parece no haber tenido ningún contacto con estos animales.
Zeng Guang, jefe científico de Epidemiología del CDPCC, ha cifrado que esta posibilidad afectó a alrededor del 40 por ciento de las víctimas, según el diario Beijing News. Feng, por su parte, apunta que no todos los pacientes "pueden recordar todo a lo que se han expuesto".
La OMS ha informado de que un equipo de expertos irá próximamente a China para examinar si el virus se puede transmitir entre humanos, a pesar de que "no hay pruebas sostenidas".