Cinco alimentos para hacer frente a la astenia primaveral

Legumbres, lentejas, garbanzos, judías, guisantes
GETTY/BORIS ZERWANN
Actualizado: lunes, 27 marzo 2017 9:31

   MADRID, 27 Mar. (EDIZIONES) -

   Uno de los síntomas que acompaña a la astenia primaveral es la falta de apetito, de hecho, más de un tercio de los españoles afirma sentirlo cuando cambia el tiempo, según la encuesta que ha realizado la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA).

   La astenia se caracteriza por un estado de debilidad y fatiga que conducen a una incapacidad para realizar actividades rutinarias y a una disminución del apetito, ha explicado la nutricionista de la SEDCA, Andrea Calderón.

   Según esta experta, "si tomamos menos nutrientes de los necesarios contribuimos a empeorar la situación". Por este motivo, la SEDCA ha elaborado un listado con los cinco grupos de alimentos que no deben faltar en la dieta para hacer frente a la astenia primaveral.

   - Integrales: aportan fibra lo que puede evitar el estreñimiento que puede causar más cansancio y malestar. También tienen más vitaminas, minerales y antioxidantes que en su versión blanca y refinada.

   - Verduras: la primavera es temporada de apios, rábanos y nabos que son buenos para la depuración del organismo y que además son antioxidantes. También son aconsejables las alcachofas, espinas, espárragos trigueros y blancos.

   - Frutas: destacan las fresas por su cantidad de vitamina C y antioxidantes, así como los melocotones y albaricoques que son ricos en fibra, potasio, vitamina C y carotenoides.

   - Frutos secos: está indicado para tomar entre horas en pequeñas raciones de unos 30 gramos diarios. Tienen omega3 que ayuda a aumentar las defensas del organismo y prepararlo para combatir el estado de debilitamiento y cansancio.

   - Legumbres: ayudan por su gran cantidad de fibra y minerales como magnesio, selecio, zinc y potasio que refuerzan el sistema inmunitario.

   Una de las claves para hacer frente a este cambio de estación y adaptarse de la mejor manera posible es seguir unos consejos básicos de alimentación. "Lo principal es seguir un patrón de dieta mediterránea, con cinco comidas al día que incluyan platos más ligeros, sobre todo en el caso de la cena", ha afirmado Calderón.

   Las comidas copiosas contribuyen a aumentar el malestar y, por tanto, los síntomas de la astenia. Además, conviene incrementar la hidratación y practicar ejercicio.