DETROIT 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
Vivir en barrios con muchos restaurantes de comida rápida se asocia con un mayor riesgo de ictus, según un estudio de la Universidad de Michigan en Estados Unidos. El trabajo se ha hecho público durante una conferencia internacional de la Asociación Americana de Ictus.
Los investigadores descubrieron que los habitantes de los vecindarios con el número más elevado de restaurantes de comida rápida tenían un 13 por ciento más riesgo de sufrir ictus isquémicos que los que viven en áreas con el menor número de restaurantes de este tipo. El riesgo de ictus aumentaba en un uno por ciento por cada restaurante de comida rápida que hubiera en su barrio.
Los autores sin embargo señalan que el descubrimiento de un mayor riesgo sólo demuestra una asociación pero no prueba que los restaurantes de comida rápida aumenten el riesgo de ictus.
Esta asociación entre ictus y comida rápida surgió de datos recogidos de un proyecto en marcha que recoge la ocurrencia de ictus en el condado de Nueces en Texas. En el estudio actual se examinaron 1.247 ictus isquémicos que se produjeron desde el inicio del estudio en 2003.
El condado de Nueces tiene 262 restaurantes de comida rápida, que los investigadores definen como tal si tienen cuatro características: servicio rápido de comida, comida para llevar, la no existencia de camareros o en número limitado y la obligación de pagar antes de recibir la comida.
Los investigadores determinaron el número de establecimientos de comida rápida en cada vecindario y los dividieron en cuatro grupos según el número de estos establecimientos que existían en ellos.
El estudio apoya investigaciones previas que sugerían un vínculo entre la comida rápida y la enfermedad cardiovascular, ante el que algunas cadenas de restaurantes han respondido incluyendo más opciones nutritivas en sus menús.