MADRID 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un novedoso videojuego basado en técnicas de entrenamiento cognitivo podría ayudar a reducir el deterioro cognitivo, retrasando la evolución de los síntomas de enfermedades neurodegenerativas, según asegura un equipo de investigadores de la Universidad de Salamanca y de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer (AFA), autores de este proyecto.
En concreto, una primera investigación ha comparado la eficacia de un videojuego en estas tareas frente a una técnica de entrenamiento cognitivo más convencional, con ejercicios de lápiz y papel, obteniendo mejores resultados en el primero. Se trata de una parte de un estudio más amplio, recogido por Plataforma Sinc, que se publicará en la revista 'Psicothema'.
Su objetivo era evaluar la eficacia del 'Big Brain Academy' (BBA), un programa de entrenamiento cognitivo computarizado basado en un videojuego, frente al Programa de Psicoestimulación Integral (PPI), un instrumento típico de entrenamiento cognitivo, en pacientes con Alzheimer.
"Nuestro objetivo general es analizar terapias no farmacológicas en los pacientes y pretendemos centrarnos en las que están basadas en aspectos cognitivos, ya que en la actualidad están en auge los programas de estimulación cerebral y el entrenamiento cognitivo de las personas con demencias", explica el especialista de la Facultad de Psicología de la Universidad de Salamanca, Israel Contador.
La idea es investigar sobre la eficacia de este tipo de programas a la hora de retrasar el deterioro o el avance de la enfermedad. "Actualmente las demencias no tienen curación, pero se trabaja sobre la idea de buscar instrumentos que nos ayuden a retrasar la evolución sintomática de la enfermedad", comenta el experto.
DECLIVE COGNITIVO "MÁS LENTO"
Un total de 45 pacientes, en fase leve, se dividieron en dos grupos de tratamiento, donde los pacientes recibieron o bien un programa de estimulación con BBA o bien un programa de estimulación tradicional, basado en tareas de papel y lápiz, durante 12 semanas. A un tercer grupo, que no recibió ningún tratamiento durante este período, se le asignó la condición de 'grupo de control'.
La eficacia diferencial de los programas se evaluó antes y después a través de medidas neuropsicológicas, conductuales y funcionales estandarizadas. "El grupo que utilizó el videojuego mostró un declive cognitivo significativamente más lento en comparación con los otros", señala Contador, que asegura que también manifestaron una reducción de la sintomatología depresiva "significativamente mayor".