FRANKFURT 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
La sonda de la Agencia Espacial Europea (ESA) Venus Express ha observado un enigmático brillo en la atmósfera nocturna de Venus. Esta luz infrarroja procede del óxido nítrico y muestra a los científicos que la atmósfera de nuestro plantea más cercano es un agitado lugar de grandes tempestades y turbulencias.
Desafortunadamente, este brillo sobre Venus no puede ser contemplado a smple vista, porque se produce en la banda infarroja. Sin embargo, la Venus Express, está equipada con un sofisticado Espectrómetro que puede registrar esas longitudes de onda.
Este instrumento, denominado VIRTIS (Visible and Infrarred Thermal Imaging Spectrometer), ha realizado dos detecciones de estas emanaciones nocturnas de óxido nítrico en Venus. Se trata de la primera vez que se registran este tipo de detecciones en un planeta, y proporcionan una nueva visión sobre la atmósfera de Venus, informó la ESA.
"Estas emanaciones pueden darnos un montón de información", declaró Antonio García Muñoz, que estuvo en la Universidad Nacional de Australia cuando se desarrolló el estudio, y que ahora trabaja en el Instituto de Astrofísica de Canarias. "Puede proporcionar detalles sobre la temperatura, dirección del viento, composición y química de la atmósfera".
En última instancia, este brillo está provocado por la luz ultravioleta procedente del Sol, que fluye a través de la atmósfera del planeta y que provoca la destrucción de moléculas en átomos y otras moléculas más simples. Estos átomos libres pueden recombinarse de nuevo y, en casos específicos, la molécula resultante, recibe energía extra que se manifiesta en forma de luz. En el lado del planeta donde da el sol, los átomos no encuentran el camino para reintegrarse debido al brillo de nuestra estrella, pero por la noche, sí se produce la reagrupación y puede ser vista con un instrumento adecuado.