MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
¿Sabías que tu corazón no solo late mientras duermes, sino que también envía señales cruciales sobre tu salud futura? La variabilidad en la frecuencia cardíaca durante la noche puede ser la clave para detectar problemas como accidentes cerebrovasculares, depresión o enfermedades metabólicas mucho antes de que aparezcan los primeros síntomas. Prestar atención a estos patrones puede marcar la diferencia entre actuar a tiempo o enfrentarse a complicaciones graves.
CÓMO EL RITMO NOCTURNO DEL CORAZÓN ANTICIPA PROBLEMAS DE SALUD
Una nueva investigación del Departamento de Neurología del Inselspital del Hospital Universitario de Berna (Suiza) presentada en el Congreso 2025 de la Academia Europea de Neurología (EAN), que se celebra en Helsinki (Finlandia) ha descubierto un vínculo poderoso entre el ritmo cardíaco nocturno y futuras condiciones de salud, incluso en personas sin problemas de sueño evidentes.
El estudio analizó a 4.170 personas durante un período de observación de 13.217 personas-año y descubrió que la variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC) durante el sueño puede servir como una poderosa señal de alerta temprana de futuros problemas de salud, como accidentes cerebrovasculares, depresión y disfunción cognitiva.
La VFC refleja la fluctuación de los intervalos de tiempo entre latidos. La VFC se ajusta constantemente en respuesta a las demandas físicas y emocionales del cuerpo. Durante el día, la VFC es fisiológicamente alta, lo que corresponde a altos niveles de actividad.
Por la noche, y especialmente durante el sueño profundo, la VFC suele disminuir, lo que refleja un cambio a un modo de descanso y reparación, donde el cuerpo se centra en la recuperación y la recarga para el día siguiente.
La investigación reveló que ciertos patrones de variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC) se relacionaban con futuras afecciones de salud. Los participantes que posteriormente desarrollaron un ictus a menudo presentaban una VFC inusualmente alta y errática.
LA VARIABILIDAD DE LA FRECUENCIA CARDÍACA DURANTE EL SUEÑO
Por el contrario, una VFC baja era común en quienes posteriormente desarrollaron depresión. También se observó una VFC alta con patrones de frecuencia alterados en individuos que posteriormente desarrollaron enfermedades metabólicas. De igual manera, las enfermedades cardiovasculares y endocrinas también se asociaron con una VFC alta.
"La variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC) es importante para la salud cerebral y general porque refleja la eficacia de la autoregulación del cuerpo, principalmente a través de la actividad del sistema nervioso autónomo", explica la autora principal del estudio, la doctora Irina Filchenko. "Este sistema controla procesos inconscientes vitales como la respiración, la digestión y el tono muscular, ayudando al cuerpo a mantener el equilibrio y adaptarse a las demandas internas y externas".
Si bien muchas personas están familiarizadas con el seguimiento de las etapas del sueño o el tiempo total de sueño, la variabilidad de la frecuencia cardíaca nocturna ofrece una perspectiva única sobre cómo funciona el cuerpo durante el sueño. Esto es especialmente importante porque el sueño es un momento crucial para muchos procesos fisiológicos fundamentales para la salud a largo plazo, como la reparación celular, la consolidación de la memoria y la eliminación de desechos metabólicos del cerebro.
MONITORIZAR LA VFC NOCTURNA
Es importante destacar que los investigadores creen que la variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC) podría actuar como un marcador fisiológico temprano, mostrando cambios sutiles en el funcionamiento corporal antes de que aparezcan los síntomas o diagnósticos tradicionales. Esto podría abrir la puerta a la prevención y la intervención temprana en enfermedades como el Alzheimer o el ictus, donde la acción oportuna puede mejorar los resultados del paciente.
El doctor Filchenko señala: "Algunos participantes tuvieron un sueño 'normal' según los criterios tradicionales, con poca fragmentación del sueño y el equilibrio esperado entre las etapas del sueño. Sin embargo, la variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC) reveló una situación diferente, detectando riesgos que las métricas comunes del sueño no detectaban. Esto sugiere que debemos replantearnos cómo definimos y medimos el sueño óptimo".
Los hallazgos del estudio también plantean la posibilidad de utilizar tecnología portátil para monitorizar los patrones de VFC a lo largo del tiempo. Si bien la precisión e interpretación de los dispositivos de consumo actuales varían, los expertos creen que las mejoras futuras podrían permitir a las personas monitorizar los cambios en la VFC como parte del control de salud regular.
La investigación refuerza la creciente evidencia de que el sueño es un pilar fundamental para la salud a largo plazo y que los patrones sutiles podrían ofrecer una oportunidad para prevenir enfermedades graves. "El mensaje general es que el sueño no es solo un estado pasivo de descanso, sino un proceso activo y dinámico que desempeña un papel vital en el mantenimiento de la salud a largo plazo, especialmente la salud cerebral. Nuestros hallazgos refuerzan la idea de que la prevención primaria es importante y de que los problemas de salud comienzan mucho antes de que aparezcan los síntomas clínicos", concluye el doctor Filchenko.
¿Qué es la variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC)?
La VFC se refiere a las fluctuaciones en los intervalos entre cada latido del corazón. Es un reflejo del equilibrio entre las ramas simpática y parasimpática del sistema nervioso autónomo. Durante el día, es normal que la VFC sea alta debido a la actividad física y emocional. En la noche, especialmente en el sueño profundo, la VFC debería disminuir, lo que indica un estado de recuperación y reparación.
Patrones reveladores de riesgo
Los investigadores encontraron que ciertos patrones de VFC se asocian con enfermedades específicas:
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VFC alta y errática: común en personas que más tarde sufrieron un accidente cerebrovascular.
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VFC baja: observada en individuos que posteriormente desarrollaron depresión.
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VFC alta con patrones alterados: vinculada a enfermedades metabólicas, cardiovasculares y endocrinas.
