MADRID, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
Utilizar zapatos heredados puede causar deformidades en los pies de los niños, especialmente en la etapa en la que se están formando los pies, entre los 3 y 8 años, según ha alertado el Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV).
"Aunque unos zapatos parezcan estar nuevos, si han sido utilizados con frecuencia, se habrán adaptado a los pies de ese niño, por lo que, si pasa a usarlos otro, podría alterar el desarrollo normal de su pie. Si le duelen, caminará incómodo o le pueden causar alguna herida, o, por ejemplo, apoyará mal para caminar de una forma más confortable y esto derivará en deformaciones", ha explicado el presidente del ICOPCV, Alfredo Martínez.
El calzado usado puede causar molestias, rozaduras y alterar la marcha habitual y, en casos más graves, provocar algún tipo de patología por mal apoyo. Por ello, solo se deben reutilizar zapatos que se hayan usado muy pocas veces, por ejemplo, el calzado de ceremonias; que no estén deformados; que no tengan pliegues en el empeine; que tengan los refuerzos de la puntera y el talón intactos; y que tengan el tacón y la suela sin desgastar.
En caso de reutilizar el calzado, es recomendable cambiar las plantillas, secarlos bien por si tuvieran algo de humedad y desinfectarlos con antifúngico, para evitar un posible contagio por hongos.