La utilización de caballos mejora el tratamiento de enfermedades como el autismo y la parálisis cerebral

Rutas a caballo por Toledo
EP/DIPUTACIÓN TOLEDO
Actualizado: lunes, 22 agosto 2011 16:17

MADRID, 22 Ago. (EUROPA PRES) -

La utilización de caballos en el tratamiento de enfermedades como la parálisis cerebral o el autismo favorece una mejor calidad de vida y una inclusión en la sociedad. Está terapia utiliza el caballo como instrumento terapéutico, en una forma de trabajo integral y complementaria de rehabilitación, educación y reeducación para las personas con necesidades especiales.

La equinoterapia es una terapia complementaria a la terapia principal que tiene el objetivo de tratar distintos tipos de enfermedades como el autismo, la hiperactividad, parálisis cerebral, trastorno de conductas, entre otras.

Esta terapia equina tiene un tratamiento médico y deportivo, con trabajo de animales. Como explica a Europa Press Ismael Pinto, director de la asociación de equinoterapia que lleva su mismo nombre, "puede aplicarse a todo tipo de enfermedades. Entre las que mas se recurre están la parálisis cerebral, autismo, traumatologias, discapacidad del aparato locomotor y parálisis sensoriales".

"Es importante tener una autorización por parte del médico especialista. Si el médico considera que es beneficioso aplicar de forma complementaria la equinoterapia, cualquier patología puede tratarse", añade Pinto.

Los beneficios que aporta esta terapia son físicos, dado que mejorar en equilibrio vertical y horizontal, regula el tono muscular y adquiere mejor coordinación motriz fina y gruesa pero además el paciente mejora de autoestima y autoconfianza, desarrolla la constancia y adquiere mayor seguridad.

Como explica el experto, "la terapia aporta numerosos beneficios, como el equilibrio, el aumento de la sensibilidad y la seguridad en uno mismo ya que superar los miedos al caballo aportar confianza propia".

La equinoterapia puede ser aplicada a todo tipo de pacientes y a todo tipo de edades, ya que las enfermedades que se pueden tratar afectan a todos grupos de edades. Concretamente Pinto tiene "pacientes de 0 a 80 años, y estas terapias son aplicables a todas las edades".

Las terapias con caballos suelen tener una duración de seis meses, con una afluencia de dos a tres veces por semanas. Como aclara el experto "dar un plazo concreto es muy complicado porque depende de la enfermedad, su grado de afección y el tipo de paciente. Lo normal es acudir un par de veces o tres por semana y observar la evolución", explica.