MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las personas que pasan más tiempo en sus teléfonos inteligentes, particularmente en juegos o aplicaciones de redes sociales, tienen más probabilidades de rechazar recompensas más grandes por las que tendrían que esperar en favor de recompensas más pequeñas e inmediatas, según publican los investigadores en la revista de acceso abierto 'PLOS ONE'.
Investigaciones anteriores han sugerido similitudes de comportamiento entre el uso excesivo de teléfonos inteligentes y los comportamientos desadaptativos como el abuso de alcohol, el juego compulsivo o el abuso de drogas. Sin embargo, la mayoría de las investigaciones sobre el uso excesivo de teléfonos inteligentes y los factores de personalidad relacionados con un mayor tiempo de pantalla se han basado en mediciones autoinformadas de la participación de los teléfonos inteligentes.
Para obtener una mayor claridad, Tim van Endert y Peter Mohr, de la Freie Universitt de Berlín, en Alemania, reclutaron voluntarios que aceptaron permitir que los investigadores recopilaran datos reales sobre la cantidad de tiempo que pasaron en cada aplicación en sus iPhones durante los últimos siete a diez días.
Se recopilaron datos de uso de 101 participantes, quienes también completaron varias tareas y cuestionarios que evaluaron su autocontrol y sus comportamientos con respecto a las recompensas.
El análisis encontró que los participantes con mayor tiempo total frente a la pantalla eran más propensos a preferir recompensas inmediatas más pequeñas a recompensas más grandes y tardías. La preferencia por recompensas más pequeñas e inmediatas se vinculó con un uso más intensivo de dos tipos específicos de aplicaciones: juegos y redes sociales.
Los participantes que demostraron un mayor autocontrol pasaron menos tiempo en sus teléfonos, pero el nivel de consideración de las consecuencias futuras de un participante no mostró correlación con su tiempo frente a la pantalla. Ni el autocontrol ni la consideración de las consecuencias futuras parecieron afectar la relación entre el tiempo frente a la pantalla y la preferencia por recompensas inmediatas más pequeñas.
Estos hallazgos se suman a la creciente evidencia de un vínculo entre el uso de teléfonos inteligentes y la toma de decisiones impulsiva, y respaldan la similitud entre el uso de teléfonos inteligentes y otros comportamientos que se consideran desadaptativos. Los autores sugieren que una mayor investigación sobre la participación de los teléfonos inteligentes podría ayudar a informar las políticas para orientar el uso prudente.
Los autores añaden: "Nuestros hallazgos proporcionan más evidencia de que el uso de teléfonos inteligentes y la toma de decisiones impulsiva van de la mano y que el compromiso con este dispositivo debe ser examinado críticamente por los investigadores para guiar un comportamiento prudente".