Expertos trabajan en afinar el perfil del adicto a nuevas tecnologías para establecer "programas de prevención" y "tratamientos adecuados"
SANTANDER, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El catedrático de Psicología Clínica de la Universidad del País Vasco (UPV) y especialista en adicción a las nuevas tecnologías, Enrique Echeburúa, explicó hoy que el grupo que corre "un mayor riesgo" de padecer esta enfermedad lo constituyen los jóvenes "impulsivos" que buscan "emociones fuertes" y tienen "una baja autoestima".
Según indicó, estas características son "comunes" a todos los tipos de adicciones y, en el caso de las nuevas tecnologías, han sido extraídas de la experiencia con los "pocos casos" que por el momento se han "detectado" en España, donde los especialistas "intentan determinar si hay perfiles de riesgo" específicos para este tipo de adicción, con el objetivo de establecer "programas de prevención" y "tratamientos adecuados".
Así lo afirmó Echeburúa en una rueda de prensa en la que compareció acompañado del también catedrático en Psicología Clínica de la Universidad de Santiago de Compostela, y especialista en adicción juvenil a las drogas, Elisardo Becoña, y el catedrático de Psicología Básica de la Universidad Complutense Helio Carpintero, en el marco de la Escuela de Psicología 'José Germain'. 'Problemas actuales de la psicología infanto-juvenil', que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Tal y como apuntó el experto, a parte de las características personales y sociales, "también puede haber situaciones coyunturales" que desencadenen en una adicción a internet y las nuevas tecnologías, como "el estrés", un "desengaño amoroso" o "problemas de trabajo".
En este sentido, Echeburúa, --que descartó el "alarmismo" dado que este problema en España presenta índices "minoritarios" en comparación con otras adicciones--, señaló que "el enganche" a las nuevas tecnologías "puede llevar a la creación de una identidad ficticia", al "aislamiento social" y a "la obesidad derivada del sedentarismo", entre otras consecuencias.
JUVENTUD INFORMADA
Para Becoña y Carpintero, la solución a este tipo de problemas radica en el desarrollo de "acciones de tipo educativo" en las que se aporte más información a los jóvenes, que "operan con las informaciones que tienen" y no "de manera impulsiva" como se tiende a creer.
Al respecto, el catedrático de Psicología Básica aseguró que una gran parte de la juventud "no tiene una percepción del riesgo" que puede acarrear, por ejemplo, "el consumo de drogas" o "un embarazo no deseado", algo que, desde su punto de vista, se debe a que "no se da suficiente información" sobre estas cuestiones y existen "multitud de familias que aceptan cualquier cosa" con "permisividad".
En esta línea, Becoña aseveró que la sociedad no puede seguir "ignorando" los problemas de la juventud, sino "poner a trabajar a sus expertos" junto a "las autoridades" en una política que "sin coartar la libertad" sea "motivadora de conductas saludables".