MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio dirigido por la epidemióloga de enfermedades infecciosas en la Escuela de Salud Pública y Medicina Tropical de la Universidad de Tulane, Estados Unidos, Patricia Kissinger podría cambiar la forma en que los médicos tratan una enfermedad de transmisión sexual común.
La profesora Kissinger y un equipo de investigadores encontraron que la dosis única recomendada de medicamentos no es suficiente para eliminar la tricomoniasis, la ETS curable más común, que puede causar complicaciones graves en el parto y hacer que las personas sean más susceptibles al virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
A nivel mundial, se estima que cada año se producen 143 millones de nuevos casos de tricomoniasis entre las mujeres y la mayoría no presenta síntomas, sin embargo, la infección está causando problemas ocultos. El tratamiento recomendado durante más de tres décadas ha sido una dosis única de los antibióticos metronidazol o tinidazol.
Los investigadores, cuyo trabajo se publica en 'Lancet Infectious Diseases', reclutaron a más de 600 mujeres para el ensayo aleatorizado en Nueva Orleans; Jackson, Mississippi; y Birmingham, Alabama. La mitad de las mujeres tomaron una dosis única de metronidazol y la otra mitad recibió tratamiento durante siete días.
AUMENTAR LAS DOSIS
Kissinger y su equipo encontraron que las mujeres que recibieron múltiples dosis del tratamiento presentaban la mitad de probabilidades de sufrir la infección después de tomar todos los medicamentos en comparación con las mujeres que solo tomaron una dosis única.
"Hay alrededor de 3,7 millones de nuevos casos de tricomoniasis cada año en Estados Unidos --señala Kissinger---. Eso significa que muchas mujeres no han recibido un tratamiento inadecuado durante muchas décadas".
La tricomoniasis puede causar un parto prematuro en mujeres embarazadas y los bebés nacidos de madres infectadas tienen más probabilidades de tener bajo peso al nacer. El parásito también puede aumentar el riesgo de contraer o contagiar el VIH.
Kissinger cree que los Centros para el Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos cambiarán sus recomendaciones de tratamiento debido a los resultados de este estudio. "Necesitamos intervenciones basadas en la evidencia para mejorar la salud --dice Kissinger--. "Ya no podemos hacer algo porque es lo que siempre hemos hecho. Espero que este estudio ayude a cambiar las recomendaciones para que las mujeres puedan recibir el tratamiento adecuado para esta ETS curable común".