La mayoría de las lesiones se producen por levantar peso de forma inadecuada o por mantener malas posturas durante periodos largos de tiempo
MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
Trabajar en sectores que exijan un esfuerzo físico significativo como el de la construcción, la agricultura o, en el otro extremo, que impliquen poca actividad como el de administrativo, favorece la aparición de lesiones cervicales y lumbares que se conviertan en crónicas, según afirma el director de la Clínica Reumatológica Dr. Ponce, Antonio Ponce.
Entre los que precisan un esfuerzo físico mayor, "la mayoría de los problemas de espalda aparecen por malas posturas a la hora de levantar objetos pesados, sin flexionar las rodillas, o manteniendo la carga alejada del cuerpo, algo que hace perder el punto de equilibrio y supone un sobreesfuerzo para la zona lumbar", explica a Europa Press el doctor Ponce.
Por su parte, las lesiones producidas en los trabajos de oficina "suelen estar generadas por una mala postura ergonómica, no situando la pantalla a la altura de los ojos, por ejemplo, manteniendo la misma postura durante más de una hora sin descansar o utilizando sillas con el respaldo muy bajo", comenta.
Con independencia del tipo de trabajo y con el objetivo de prevenir este tipo de lesiones, el doctor Ponce recomienda "hacer ejercicio y evitar la obesidad" en todos los casos. "Manteniendo una buena tonicidad en espalda y abdomen, gran parte de estas lesiones son evitables", asegura.
A este respecto, el doctor Ponce recuerda que las lesiones en la espalda "son una de las primeras causas de incapacidad laboral permanente" en España. Dentro de este tipo de trastornos, comenta, "el 70 por ciento de las lumbalgias son de tipo funcional e inespecificas y se suelen resolver o por si solas o con farmacos".
Sin embargo, "a medida que la resolución del dolor se va alargando en el tiempo, lo normal es que desaparezca en unas tres o cuatro semanas, cuesta más que este paciente vuelva a ser laboralmente activo y tiene más riesgo de convertir su dolencia en crónica", explica el doctor Ponce.
NUEVOS TRATAMIENTOS
Por lo general, los pacientes con trastornos degenerativos en la espalda están "avocados" a la cirugía si el tratamiento farmacológico no surge el efecto deseado, indica este experto. No obstante, "desde hace unos cuatro años se aplica en España una nueva técnica denominada terapia de descompresión vertebral axial (VAXD)", añade.
Este nueva terapia "tiene una efectividad de en torno al 70 por ciento y mantiene al paciente asintomático entre y cuatro y siete años", afirma. "El tratamiento --apunta-- consta de 20 sesiones, una diaria, de unos 45 minutos; prácticamente dura un mes". "Se trata de un aparato, avalado por la Agencia Estadounidense del Medicamento (FDA, por sus siglas en inglés) que descomprime y acorta el espacio que había inicialmente entre las vértebras", señala.
De este modo, recalca el doctor Ponce, "se consigue evitar el pinzamiento de los nervios que provoca el dolor en la espalda, al mismo tiempo que supone una alternativa a la cirugía que, además de ser más cara (18.000 euros frente a 1.200 del VAXD), presenta los riesgos inherentes a la anestesia o cualquier complicación que pueda surgir en el quirófano".