MADRID, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
La espuma fabricada por una especie de rana puede ser un nuevo sistema de suministro no tóxico de antibióticos que ayudaría a prevenir las infecciones, según expondrán investigadores de la Universidad de Strathclyde, en Reino Unido, en la Conferencia Anual de la Sociedad de Microbiología en Liverpool, que se celebra entre el lunes y el jueves.
Mientras se aparean, las ranas Túngara ('Engystomops pustulosus') liberan un cóctel de proteínas que expulsa en forma de una espuma con sus patas traseras. Las ranas -de menos de 5 centímetros de largo-- ponen sus huevos en estos nidos de espuma para protegerlos de enfermedades, depredadores y el estrés ambiental.
Estos científicos analizaron la espuma de rana, viendo que es altamente estable y capaz de recoger medicamentos antes de liberarlos a un ritmo estable. El trabajo del equipo revela que la espuma puede liberar tintes modelo a un ritmo constante durante un periodo de 72-168 horas, mientras que la espuma cargada con el antibiótico vancomicina previene el crecimiento in vitro de la bacteria patógena 'Staphylococcus aureus' durante un periodo de 48 horas.
Se analizaron las proteínas de espuma 'in vitro' frente a los queratinocitos, un tipo de célula de la piel, durante 24 horas. Estas células estaban todavía vivas y viables después de 24 horas de exposición, lo que demuestra que la espuma no es tóxica para las células humanas.
La doctora Sarah Brozio, de la Universidad de Strathclyde, quien llevó a cabo la investigación, explica: "Las espumas son generalmente de muy corta duración por lo que no pueden tenerse en cuenta para la liberación de fármacos a largo plazo, a pesar de que tienen un gran potencial para los tratamientos tópicos".
"Esta espuma viene de una pequeña rana y, sin embargo, nos ofrece un enfoque completamente nuevo que podría prevenir infecciones de heridas y con el aumento de la resistencia a antibióticos es importante que se exploren todas las nuevas tácticas", agrega.
Actualmente, el equipo está diseñando bacterias de 'E. coli' para producir dos de los componentes de proteína de la espuma, incluyendo Ranaspumin-2, que por sí sola produce una espuma de corta duración que tampoco es tóxica para las células humanas. Los investigadores están trabajando para producir una forma completamente sintética de la espuma que es tan estable como la versión generada por la rana.
Los sistemas de administración de fármacos que se dirigen a áreas específicas del cuerpo mejoran el tratamiento de los pacientes y pueden reducir los efectos secundarios. El equipo prevé que se podrían utilizar las características de larga duración de la espuma para el tratamiento de quemaduras graves, que con frecuencia se infectan y requieren el uso de antibióticos por vía intravenosa.
"Las espumas son inusuales en la naturaleza y, por lo general, están hechas de proteínas inactivadas, pero esta espuma es estable y compatible con las células humanas, por lo que es potencialmente ideal para aplicaciones farmacéuticas. Aunque espumas como éstas están muy lejos de llegar a la clínica, podrían ayudar en el tratamiento de heridas y quemaduras, proporcionando apoyo y protección para la curación de los tejidos y la entrega de medicamentos al mismo tiempo, todo desde una pequeña rana humilde", concluye el líder de la investigación, el doctor Paul Hoskisson.