MADRID 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
El pueblo tibetano ha heredado variantes de cinco genes diferentes que les ayudan a vivir en altas altitudes, con un gen originado en la extinta subespecie humana de los denisovanos. Los profesores Hao Hu y Chad Huff ,de la Universidad de Texas, en Houston, en Estados Unidos, y sus colegas informan de estos hallazgos en un nuevo estudio publicado este jueves en 'PLOS Genetics'.
La gente del Tíbet ha sobrevivido en una meseta extremadamente alta y árida durante miles de años, debido a su increíble capacidad natural de soportar bajos niveles de oxígeno, frío extremo, exposición a la luz ultravioleta y fuentes alimentarias muy limitadas. Los investigadores secuenciaron el genoma completo de 27 tibetanos y buscaron genes que les aportan esas ventajas.
El análisis identificó dos genes ya conocidos por estar involucrados en la adaptación a gran altitud, EPAS1 y EGLN1, así como dos genes relacionados con bajos niveles de oxígeno, PTGIS y KCTD12. También seleccionaron una variante de VDR, que desempeña un papel en el metabolismo de la vitamina D y puede ayudar a compensar la deficiencia de vitamina D, que afecta comúnmente a los nómadas tibetanos.
IDENTIFICADAS ADAPTACIONES Y RELACIONES CON CHINOS HAN Y DENISOVANOS
La variante tibetana del gen EPAS1 originalmente provenía de la arcaica población denisovana, pero los investigadores no encontraron otros genes relacionados con la altitud con las raíces denisovanas. Un análisis posterior mostró que subpoblaciones chinas y tibetanas se dividieron hace entre 44.000 y 58.000 años, pero que el flujo genético entre los grupos continuó hasta hace aproximadamente 9.000 años.
El estudio representa un análisis exhaustivo de la historia demográfica de la población tibetana y sus adaptaciones a los retos de vivir en altas altitudes. Los resultados también proporcionan un rico recurso genómico de la población tibetana, que ayudará a futuros estudios genéticos, según los autores.
Simonson subraya: "El análisis exhaustivo de los datos de secuencias de todo el genoma de los tibetanos proporciona información valiosa sobre los factores genéticos que subyacen en la historia única de esta población y la fisiología adaptativa a gran altitud".
"Este estudio proporciona un contexto más para el análisis de otras poblaciones que permanecen a gran altitud, que exhiben características distintas de los tibetanos a pesar de las tensiones crónicas similares, así como las poblaciones de tierras bajas, en las que los problemas relacionados con la hipoxia, como los inherentes a la enfermedad cardiopulmonar o apnea del sueño, provocan una amplia gama de respuestas fisiológicas únicas", agrega.
A su juicio, los estudios futuros deben identificar la interacción entre varias vías genéticas adaptativas versus no adaptativas y factores ambientales (por ejemplo, hipoxia, dieta, frío, rayos UV) en estas poblaciones para revelar las bases biológicas de las respuestas fisiológicas individualizadas.