MADRID, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
Científicos de la Universidad de Surrey en Inglaterra han descubierto una forma de analizar los niveles de fármacos antipsicóticos comunes en el sudor a partir de las huellas dactilares de los pacientes, ofreciendo una alternativa más rápida, cómoda y conveniente a las extracciones de sangre para el seguimiento de los pacientes.
Los fármacos antipsicóticos tratan a pacientes muy vulnerables. Mantener un régimen de tratamiento es difícil para muchos pacientes, pero no tomar la medicación se asocia a un mayor riesgo de malos resultados para la salud. Estos fármacos también son muy potentes y tienen fuertes efectos secundarios, por lo que a menudo se utilizan análisis de sangre para calibrar la dosis del paciente y confirmar que está tomando la dosis recomendada.
"Nuestra prueba ofrece a los pacientes una forma rápida y digna de mostrar su compromiso con el tratamiento antipsicótico", ha afirmado Katherine Longman, de la Universidad de Surrey, primera autora del estudio que ha sido publicado en la revista 'Frontiers in Chemistry'.
Los científicos ya sabían que algunos fármacos podían detectarse en el sudor de la yema de un dedo, sin necesidad de personal especializado y con mayor facilidad de almacenamiento y transporte. Las muestras de sudor dactilar, a diferencia de la sangre, pueden transportarse a temperatura ambiente.
Para comprobar si los fármacos antipsicóticos también podían detectarse en el sudor, reclutaron a 60 pacientes que recibían clozapina, quetiapina u olanzapina, así como a 30 controles negativos. 11 pacientes que tomaban clozapina también accedieron a suministrar muestras de sangre para poder comprobar la correlación entre los indicadores del sudor y los de la sangre. Se pidió a los pacientes que informaran de su dosis y de la dosis más reciente que habían tomado.
Los investigadores recogieron muestras antes y después de lavarse las manos, ya que se considera que las manos lavadas ofrecen una mejor imagen del sudor ecrino que proviene de las yemas de los dedos. Los pacientes presionaron las yemas de los dedos contra papel poroso durante 30 segundos. A continuación se recogieron estas muestras y se analizaron mediante espectrometría de masas por cromatografía líquida.
La autora correspondiente, la profesora Melanie Bailey, de la Universidad de Surrey, y el equipo también pidieron a seis personas que no tomaban los fármacos que manipularan pastillas enteras y trituradas y luego dieran sus huellas dactilares.
Este control permitió comprobar si la prueba podía verse comprometida por el hecho de que los pacientes tocaran la medicación. Los científicos pudieron confirmar la fiabilidad del método y distinguir entre la presencia de los fármacos en el sudor de los pacientes y la presencia del fármaco en sus manos.
HUELLAS DACTILARES DE LA MEDICACIÓN
La prueba detectó con precisión la presencia de fármacos antipsicóticos en todos los pacientes que los tomaban. Fue más eficaz con la clozapina, ya que un análisis piloto de un subgrupo de pacientes reveló que los niveles de metabolitos de clozapina en el sudor de los dedos se correlacionaban con los niveles hallados en la sangre.
Según los investigadores, esto plantea la interesante posibilidad de que, con el tiempo, la prueba pueda cuantificar los niveles de clozapina en el sudor de un paciente en lugar de limitarse a detectarlos.
La prueba también detectó sistemáticamente la quetiapina, aunque se trataba de un grupo reducido de pacientes. La señal para la olanzapina fue menos fuerte, pero todos los pacientes que tomaban olanzapina dieron positivo en al menos una de las huellas dactilares proporcionadas antes de lavarse las manos. Además, tomaban dosis más bajas que los pacientes que tomaban los otros fármacos.
Aunque la prueba tal y como se utilizó en el estudio incluía muestras tomadas después de lavarse las manos, lo que añade tiempo e instalaciones necesarias para la prueba, la eficacia de las pruebas en huellas dactilares tomadas de manos sin lavar sugería que esto no era necesario. La supresión de este paso agilizaría y facilitaría aún más la realización de las pruebas a los profanos.
"Actualmente estamos estudiando métodos para cuantificar el nivel de droga en una huella dactilar y el momento óptimo para tomar la muestra", ha añadió Bailey.
"También estamos muy interesados en ver si las huellas dactilares pueden utilizarse para diagnosticar enfermedades, por ejemplo a partir de los metabolitos que se depositan en una muestra de huellas dactilares", ha finalizado.
