MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
Evitar juguetes ruidosos puede prevenir hasta el 60 por ciento de la pérdida auditiva en niños, según GAES, que recuerda que estos pueden provocar "daños irreversibles" en los niños.
Aunque la Unión Europea (UE) fija los límites máximos de sonido para el diseño de juguetes seguros, algunos alcanzan los 85 decibelios (dB), una cifra que provoca un riesgo en la audición de los más pequeños. Por ello, desde GAES recuerdan que es "muy importante" que los niños vivan en un entorno tranquilo y poco ruidoso, pues son uno de los grupos más vulnerables a los efectos del ruido.
La pérdida auditiva por el ruido de estos objetos no se produce de un día para otro, sino que es un proceso acumulativo que se manifiesta a lo largo de los años, provocando efectos nocivos. "El resultado de los juguetes ruidosos afecta sobre todo a los jóvenes que, en su infancia, han jugado con objetos que tenían unos niveles de decibelios superiores a lo recomendado y les ha pasado factura al cabo de los años", asegura el jefe de Sección de Otorrinolaringología en el Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza, Juan Royo.
LAS SOLUCIONES PARA PREVENIR DAÑOS AUDITIVOS
Para evitar futuras lesiones auditivas provocadas por juguetes sonoros, hay que concienciar a los padres sobre esta peligrosidad que muchos desconocen. GAES aconseja unas medidas cautelares como enseñar a los más pequeños a hacer un uso correcto de los juguetes, guardando distancia de seguridad entre el objeto ruidoso y el oído.
Además, desde GAES se recomienda que el tiempo de exposición sea menor a ocho horas en caso de juguetes con un máximo de 80 decibelios. "Si tiene mayor intensidad de ruido, no hay que usarlo o es recomendable utilizar algún protector sobre los altavoces para reducir el sonido", sigue Royo. Asimismo, es preferible jugar en espacios amplios en lugar de lugares pequeños y cerrados.
Además, antes de comprar cualquier objeto, hay que revisar los productos y leer las instrucciones para asegurar que los ruidos que emiten son inferiores a 80 decibelios y, por ello, cumplen con la normativa de la UE.
Para medir el nivel de ruido, en las tiendas, muchas veces ofrecen dispositivos denominados "sonómetros" que calculan la intensidad del ruido del producto. Para calcularlo en casa, hay diferentes aplicaciones de móvil y programas de ordenador. Una de ellas es 'Listen Responsibly', lanzada por GAES, para que los usuarios puedan medir los niveles de ruido de su entorno.