SEVILLA 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
La sudoración excesiva puede empeorar los síntomas de la dermatitis atópica, una patología que ya sufren más de 840.000 andaluces (según datos de la Asociación de Familiares y Pacientes de Dermatitis Atópica) y que, a nivel nacional, se ha triplicado en los últimos 30 años, según ha advertido la dermatóloga adjunta del Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva Inés de Alba, que está impartiendo un taller sobre el manejo de esta patología en el Colegio de Farmacéuticos de Sevilla.
Según esta experta, que se ha apoyado en recientes estudios en los que se ponen de manifiesto esta relación entre el exceso de sudoración y el empeoramiento de la dermatitis atópica, en la actualidad los corticoides tópicos aplicados con una crema emoliente (hidratante) "son la primera línea de tratamiento para esta enfermedad de la piel, siendo sus resultados son muy positivos".
Según esta especialista, aunque existen múltiples causas que desencadenan dicha enfermedad, varios estudios indican que la sudoración es uno de los principales factores. "En estos momentos, vemos muchos más brotes en consulta debido al aumento de la temperatura, que favorecen el sudor y, por tanto, la irritación de la piel", insiste.
De hecho, se ha apoyado en una reciente investigación de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad de Hirosima (Japón), publicada en la revista 'Archives of Dermatological Research en abril', que sostiene que el 80 por ciento de los pacientes con dermatitis atópica que participaron en la investigación empeoraron por culpa del sudor.
Otro estudio de la Facultad de Medicina de la Universidad de Kyorin, en Tokio (Japón), publicado en 2011 en la revista 'Current Problems in Dermatology', señala igualmente que el sudor "es un importante factor de exacerbación de los síntomas" en los pacientes que participaron en el estudio.
"La dermatitis atópica puede provocar un picor muy intenso y requerir cuidados e hidratación continuos, aún cuando desaparece el brote", ha explicado al calor de estos trabajos la doctora de De Alba, en el marco de estos talleres organizados por MSD, y que ha yan pasado por otras ciudades andaluzas como Granada o Málaga.
LESIONES MÁS COMUNES
En cuanto a las lesiones más comunes, los expertos refieren el eccema (enrojecimiento, inflamación, vesículas y costras), el prurigo o pápulas con vesículas en su cúspide, que desaparecen con el rascado siendo sustituidas por una pequeña costra; y la liquenificación o formación de placas de piel engrosadavi.
Cuando la enfermedad cursa de forma moderada o grave suele afectar también al estado emocional, ya que a menudo el picor se asocia a trastornos del sueñov.
Respecto al papel de los farmacéuticos, el vocal de Dermofarmacia del Colegio de Farmacéuticos de Sevilla, Reyes Gallego, ha aludido por su parte a la labor "muy importante" que tiene este colectivo, "implicando al paciente en su tratamiento, recomendando hábitos de vida saludables y derivando al especialista cuando sospecha que está ante un síntoma de dermatitis atópica". Por esa razón se ha decidido poner en marcha esta campaña nacional de formación a farmacéuticos.
CREMAS HIDRATANTES CON CORTICOIDES TÓPICOS
"Un buen ejemplo de corticoide que combina eficacia y un buen perfil de seguridad es 'Elocom' (mometasona furoato)", explica la doctora De Alba. Se trata de un corticoide tópico que destaca por tener una elevada potencia antiinflamatoria y una baja absorción sistémica, por lo que el riesgo de efectos secundarios es muy reducido.
Esta fármaco está indicado para el alivio de manifestaciones inflamatorias y pruríticas de las dermatosis que responden al tratamiento con glucocorticoides tales como psoriasis, dermatitis atópicas, dermatitis irritantes y/o alérgicas por contacto, además de para el alivio de manifestaciones inflamatorias y pruríticas de dermatosis del cuero cabelludo que responden al tratamiento con glucocorticoides tal como psoriasis6.
Las cremas hidratantes o emolientes, por su parte, han demostrado mejorar el estado de la piel y la calidad de vida de los pacientes con psoriasis.